El índice final de gerentes de compras manufactureras (PMI) de au Jibun Bank Japón en julio subió a 53,0 en una base ajustada estacionalmente desde 52,4 en el mes anterior.

El crecimiento de la producción fabril de Japón se recuperó en julio debido a una mayor expansión de la producción y nuevos pedidos, ya que los fabricantes se beneficiaron de una recuperación continua de la economía mundial golpeada por la pandemia de coronavirus.

El índice final de gerentes de compras manufactureras (PMI) de au Jibun Bank Japón en julio subió a 53,0 en una base ajustada estacionalmente desde 52,4 en el mes anterior.

Eso se compara con una lectura flash de 52,2 lanzada el mes pasado.

"El sector manufacturero japonés continuó viendo una mejora en las condiciones operativas al comienzo del tercer trimestre", dijo Usamah Bhatti, economista de IHS Markit, que compila la encuesta.

La encuesta del PMI mostró que la producción general y los nuevos pedidos aumentaron a un ritmo más rápido debido a la sólida producción en los sectores de la electrónica y el automóvil y la sólida demanda de semiconductores. Las expectativas de las empresas para el próximo año se mantuvieron firmes.

Los fabricantes, sin embargo, lucharon con la escasez de materiales y las interrupciones logísticas derivadas de los costos más altos, ya que los precios de los insumos aumentaron al ritmo más rápido desde septiembre de 2008.

"La interrupción de la cadena de suministro continuó afectando la actividad dentro del sector, y las empresas registraron el segundo mayor deterioro en los plazos de entrega en más de una década", dijo Bhatti.

Es probable que la tercera economía más grande del mundo crezca a un ritmo más lento de lo esperado inicialmente tanto en el segundo como en el tercer trimestre, ya que los frenos de emergencia por coronavirus en Tokio y algunas otras áreas están afectando el consumo, según una encuesta de Reuters el mes pasado.