José Ignacio, donde la oferta gastronómica marcha sobre ruedas
Lunes, Febrero 20, 2017 - 10:10
En el balneario uruguayo del departamento de Maldonado luce este verano austral la tendencia de los carros de comida.
La moda de tener comidas y bebidas al alcance de la mano se esté donde se esté llegó a José Ignacio a través de un beer truck y un coffe truck montado sobre una Vespa, que ofrecen una gama de sabores diferentes cada uno en su especialidad instalados en lugares privilegiados de este balneario.
El beer truck, situado a metros del Faro, toma su nombre de una estrofa del himno nacional uruguayo que apela a dar la vida por la defensa de la libertad y dice: "orientales la patria o la tumba" a la que modificaron como "orientales la patria o la birra" y se llaman con las siglas que surgen de la oración "OPB".
Javier Rocha, a cargo del original móvil, explica a Télam que "no se trata de una falta de respeto al himno, sino de pensar la historia como una celebración y fomentar la industria nacional de cervezas artesanales, la mayor parte naturales y sin aditamentos".
Tienen una variedad 44 tipos de cervezas, de 10 bodegas uruguayas, algunas de ellas, como O` Neill, original de Punta del Este, Volcánica de Canelones y Davok, una cerveza que empezó como como "hecha en casa" y salió a la calle en el 2008.
"El estar en un transporte nos permite trasladarnos por todo el país y ofrecer servicios para fiestas, festivales de música o eventos empresariales, suministrando hasta 500 litros de cerveza, con la temperatura que podría ofrecer una cervecería", agrega Rocha.
Otra propuesta innovadora es la instalación del sistema "pull my beer", que permite el auto servicio de cerveza usando tarjetas magnéticas RFID, pre pagas que al pasarlas descuentan el consumo e indican el saldo, por lo que se definen como "primer beer truck inteligente".
El equipo solo permite ocho cervezas por vez, por eso mantienen las clásicas y van rotando las más originales como la Weizen con frutillas; Brown, de color tostado con aroma a chocolate; la Choco IPA, cerveza negra con notas de chocolate y café, o la Stout con marcado carácter a café, entre otras.
Este verano eligieron estar en José Ignacio, pero cuando caigan las primeras hojas del otoño, partirán hacia otros destinos que anuncian a sus seguidores en las redes, ofreciendo y promocionando estas espumosas creaciones uruguayas.
El coffee truck Café Nómade también eligió un lugar de mucha visibilidad, justo a la entrada al pueblo de José Ignacio, en las terrazas del local de la boutique Magma y donde están en exposición las clásicas motocicletas italianas Vespa, en la calle Los Cisnes esquina Las Golondrinas.
Como su nombre lo indica "nació para recorrer la ciudad y el país enganchado a una motocicleta, ofreciendo variedad de café, y enseñando a la gente a saborearlo, a prepararlo de la manera correcta, para mejorar la cultura cafetera de la gente", indica Nacho Gallo quien el año pasado inició el negocio con su novia Stefanía Caredio.
"Antes de que me dejaran servir un café en la cafetería donde trabajé en Australia pasó un año, porque un buen café no se hace de cualquier manera, ni a ojo, sino respetando los métodos y las proporciones", indica a Télam Ignacio Gallo, quien además vende distintos sistemas para preparar café en casa.
MVD Roasters es la firma que importa café de Colombia, El salvador, Etiopía, entre otros países, y que además lo tuesta dándoles determinados perfiles y entregando un tostado fresco, que obliga a consumirlo antes de un mes y no lleva azúcar.
"Tostar con azúcar fue una manera que tuvieron, en épocas de escaces, de disimular la mala calidad del café, pero es una barbaridad porque mata el sabor del verdadero café" indica Gallo-.
Espresso, Capuccino, que son los preferidos, Lungo, Americano, Mocaccino, Macchiato, Cortado, Lattes, Flat White son algunas de las especialidades a las que se suma el Frappucino que no es un café que ha sido enfriado sino que se elabora con filtrado "cold brew" en frío.
Mientras Gallo sirve un capuccino y le hace un delicado y puntilloso trabajo en la espuma dibujando una hoja, la gente que vuelve de la playa se agolpa para sacarse el frío con un buen café caliente y sabe que ese sabor cremoso y al mismo tiempo liviano no admite ni siquiera una cucharada de azúcar.