Sinead McNamara fue encontrada muerta en la nave que estaba amarrada en la costa de Argostoli, en la isla griega de Kafalonia.
La modelo de Instagram, Sinead McNamara, fue hallada inconsciente y enredada en unas cuerdas en la parte trasera del yate de lujo Mayan Queen IV en Grecia, durante la madrugada del pasado 31 de agosto. La australiana de 20 años falleció minutos más tarde mientras era trasladada a un hospital por aire.
El cuerpo de Sinead McNamara que llegó el día martes a Australia, días después de que muriera en extrañas circunstancias mientras trabajaba en la tripulación de la nave perteneciente al magnate mexicano Alberto Bailleres.
Según información recogida por el diario británico Daily Mail, McNamara habría estado en su turno final en el yate de lujo amarrado en la costa de Argostoli, en la isla griega de Kafalonia, cuando murió trágicamente.
Aunque los resultados de la autopsia tardarán meses en conocerse porque se pidieron pruebas adicionales, se cree que murió de una asfixia por ahorcamiento. El forense a cargo reveló al medio inglés que le aconsejó a la familia de la joven no visitar su cuerpo en la morgue porque estaba en muy mal estado.
Quien descubrió a McNamara fue el capitán de otro yate. El hombre afirmó al portal australiano News, que vio el cuerpo de Sinead a eso de las 1:45 de la madrugada del viernes y que fracasó en su intento desesperado por salvarle la vida.
El sujeto aseguró que intentó hacerla reaccionar, pero luego de que no recibiera respuesta, comenzó a gritar pidiendo ayuda.
“Al principio celebramos porque pensamos que había sido salvada. Más tarde nos enteramos de que ella había muerto”, dijo el hombre, quien aseguró estar profundamente afectado por el incidente.
Sinead había estado trabajando como miembro de la tripulación del superyate de seis pisos, propiedad del multimillonario mexicano Alberto Bailleres, desde mayo de este año y estaba a sólo horas de reunirse con su madre y su hermana, quienes viajaban Grecia cuando ella murió.
Según los informes policiales, se cree que todos los miembros de la tripulación estaban a bordo cuando la joven murió, menos el dueño del barco, quien habría partido a México unos días antes.
Sólo dos semanas antes de su muerte, la joven modelo escribió un críptico mensaje en Instagram que algunos creen podría relacionarse con lo ocurrido: “Mi cabeza está por todos lados hoy. Llévenme de vuelta, donde mi única preocupación sea no abrirme el cráneo”, escribió junto a una foto suya.
En mayo, Sinead McNamara vendió todas sus pertenencias y voló a Europa para trabajar a bordo del Mayan Queen IV. Anteriormente, ya había trabajado en naves similares. Fue así como la australiana viajó por todo Europa en el súperyate hasta su deceso el 31 de agosto.
Aún no se ha determinado si la muerte de Sinead fue accidental, si se trató de un suicidio o si hubo intervención de terceros.
La joven de 20 años era popular en las redes sociales, donde mostraba su pasión por los viajes y la aventura.
Apenas cuatro días antes de su muerte McNamara dijo que estaba “haciendo jet ski alrededor de las aguas turquesas más bellas”, refiriéndose al mar Mediterráneo y en otras ocasiones mencionó que no podía estar mal con un trabajo como éste.