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La historia del peluquero de los pobres en Nueva York
Martes, Octubre 21, 2014 - 14:50

Es de ascendencia filipina, pero nacido en Estados Unidos. Gana un buen dinero en una peluqiería de renombre. Pero todas las semanas también se dedica a cortarle al cabello a los que no tienen dinero.

Aunque en la semana trabaja en un exclusivo salón de belleza del barrio de West Chelsea, en Manhattan, en el que los clientes desembolsan cientos de dólares por un cambio de look, los días domingo Mark Bustos sale a la calle a cortar el pelo gratis a los indigentes de la Gran Manzana.

“Como la peluquería es mi pasión, esta es la forma que yo tengo para retribuir a los demás", explica el profesional del peinado, quien tiene 30 años.

Tanto su familia como la de su novia Lala Javier, también del mundo del estilismo, vienen de Filipinas. Ellos nacieron en Estados Unidos. Hace dos años decidieron viajar al país de sus orígenes y dieron rienda suelta a su pasión por la dinámica solidaria, ya que se dedicaron a cortales el cabello a los niños de más escasos recursos.

Después de ese viaje, Bustos decidió replicar la iniciativa en Nueva York. Posee una atractiva marca, pues también ha llevado su arte hacia los más necesitados de Los Ángeles, Jamaica y Costa Rica.

El estilista siempre va acompañado de su novia y de su amigo fotógrafo Devin Masga, quien retrata a Bustos cortando el cabello de los indigentes para que después suba las imágenes a Instagram con la etiqueta #BeAwesomeToSomebody (Sé increíble con alguien).

Aunque hasta ahora su proyecto logra un positivo impacto en el día a día en las vidas de las personas a quienes ayuda, le da vueltas a la idea de fundar una organización que generte conciencia en torno a generar actitud solidarias en el gente.

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