<p>Tomando como referencia los últimos reportes de IDC, sabemos que la información almacenada en los sistemas aumenta 58% año contra año y que probablemente alcanzará los 1.610 exabytes el 2011. <br />Por otra parte, la naturaleza de los datos está cambiando: <strong>el 80% de los datos no son estructurados (documentos de Office, imágenes, etc); el 80% de la información no se vuelve a usar después de 90 días; el 68% de las compañías requieren 100 años de archivo histórico por nuevas reglamentaciones y el almacenamiento de esa información consume el 40% de la energía de los datacenters.</strong></p><p>Entonces, la pregunta es, ¿cuánta de toda esta información es realmente relevante para el negocio?¿Usamos frecuentemente cada uno de los datos que almacenamos? ¿Cada cuánto los usamos? Y una vez sabiendo esto ¿cómo podemos gestionar más inteligentemente nuestros registros, para rentabilizarlos, que nos den valor agregado y que, a su vez, nos permita reducir costos de operación? </p><p><strong>Una estrategia de administración de la información, a través de la asignación de Tiers, es el método de almacenamiento con la mejor relación costo/efectividad, que permite disponibilizar requerimientos de primera necesidad y mantener en una solución distinta, probablemente más económica</strong>, los datos que debemos archivar por periodos indefinidos de tiempo, como por ejemplo, documentos que sirvan para cumplir con regulaciones.</p><p>La administración de los datos está compuesta de cuatro capas básicas. Cada una contribuye al todo del sistema independientemente:</p><p>La Capa 1 es la fuente de la información. Ésta puede ser un desktop y una persona tipeando y guardando archivos, o bien, una máquina que genera información en un rango de 1 terabyte o más al día.</p><p>La Capa 2 es la administración de la información desde el punto de vista del contenido. La clave es construir metadata que describa el contenido y lo haga fácilmente ubicable y compartible. </p><p>La Capa 3 tiene que ver con la preservación de lo almacenado, asegurando la disponibilidad y sustentabilidad de los datos requerida. Las características básicas incluyen el chequeo de la integridad de la información, detección y corrección preventiva de errores, y la mantención de copias múltiples según las políticas corporativas. </p><p>La Capa 4 es el aparato físico donde la información es almacenada. Esto incluye discos de alta velocidad para metadata y contenido activo, discos optimizados en costos y capacidad, de menor rendimiento para información menos activa, y cinta para almacenamiento de largo plazo, además de generación de copias múltiples, de ser requerido. </p><p><strong>La integración de una solución de administración de contenido y con una que administre la ubicación de ese contenido, resuelve el desafío del crecimiento exponencial de la información al mismo tiempo que agrega valor a la forma en que se gestionan los datos corporativos y generan ahorros para la compañía.</strong></p><p><strong>Lo que cada organización debe tener en cuenta al momento de decidir por un correcto lineamiento de almacenamiento es que la clave está en la consolidación de los datos, preferentemente mediante un repositorio institucional que almacene y centralice todo tipo de información</strong>. Desde allí, evaluar cuáles son las mejores herramientas de hardware y software para administrar y estar a la altura en cuanto a la cantidad y rapidez con la que se necesita gestionarla. </p>