La paradoja de Beyoncé: portada de Vogue, pero no habla hace un año con la prensa
Domingo, Agosto 23, 2015 - 10:51
La edición de septiembre es la más importante de la revista y con Beyoncé a la cabeza es la primera vez que una mujer de color ocupa ese espacio en la publicación.
Si bien en septiembre va a ser la tercera vez que la mega artista estadounidense Beyonce aparezca en la portada de la biblia de la moda mundial, la revista Vogue, lo cierto es que el suceso sólo remarca la paradoja mediática de la también conocida como Queen B.
Resulta que hace más de un año que dio su última entrevista y desde el 2013 que no escribe en Twitter. Obviamente no está desaparecida de la escena, pero -por cierto- su modo de relacionarse con los medios es claramente especial.
La única red social con la que da cuenta de su vida es Instagram. Y cuando desmiente alguna información, no utiliza palabras, sólo imágenes.
Cuando se dijo que estaba nuevamente embarazada, subió una foto en bikini que no sólo reveló su escultural figura, sino que -claramente- demostraba que no esperaba otro bebé.
Y cuando se dijo que se llevaba “pésimo” con la mediática chica de las redes sociales Kim Kardasshian, subió otra foto para desmentir en la que ambas aparecen “de lo mejor que hay”.
La edición de septiembre es la más importante de la revista Vogue y con Beyoncé a la cabeza es la primera vez que una mujer de color ocupa ese espacio en la publicación.
Atractivamente ataviada con un vestido de encaje color lavanda, el pelo mojado y una mirada que derrite, las imágenes captadas por el fotógrafo peruano Maria Testino revelan en todo su esplendor la belleza de la artista.
Surgida a fines de los años 90 como la voz principal del trío Destiny's Child (junto a Kelly Rowland y Michelle Williams), Beyonce supo lucir todos sus talentos individuales cuando –quince años después- la banda decidió sellar su carrera. Sin embargo, hasta ahora el grupo no deja de vender disco, dinámica que supera los 60 millones en todo el mundo.
A todo eso, la artista suma una carrera solista que no conoce de fracasos.
Con 14 millones de seguidores en Twitter, desde 2013 no se registra ninguna actividad de la cantante en la red social, donde tanto su fotografía de perfil como la cabecera de la página son dos recuadros azul aguamarina. Exactamente la misma fotografía con la que se identifica en Instagram, donde atesora 43 millones y medio de seguidores. Sin seguir ella absolutamente a nadie.
Desde "Dangerously in Love" (2003) hasta el simple "Beyoncé" (2013), la lista de publicaciones de la artista es tan envolvente como su imagen, sumando cinco trabajos de estudio y más de una decena en vivo.
La autora del perfil de la artista, Margo Jefferson, confirmó que su crónica se basó en fuentes indirectas, sin cruzar palabra ni con ella ni con su equipo.