Fernández Izaguirre, colaborador del portal 14ymedio y de la revista La Hora de Cuba, estuvo detenido en la ciudad de Camagüey donde reside tras acudir el martes a una citación de la policía política para ser interrogado, práctica común utilizada como forma de intimidación.
Miami.- La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó la detención por más de 24 horas del periodista Ricardo Fernández Izaguirre y reprobó enérgicamente las prácticas represivas del Estado cubano contra quienes ejercen el periodismo de manera independiente.
Fernández Izaguirre, colaborador del portal 14ymedio y de la revista La Hora de Cuba, estuvo detenido en la ciudad de Camagüey donde reside tras acudir el martes a una citación de la policía política para ser interrogado, práctica común utilizada como forma de intimidación. Es la quinta vez que se le detiene en 2019.
El presidente de la SIP, Christopher Barnes y presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información, Roberto Rock, coincidieron en que "este nuevo encarcelamiento evidencia que la represión del régimen continúa", tal como denunció la organización en su asamblea general de octubre en Miami.
Barnes, director general del diario jamaiquino The Gleaner y Rock, director del portal mexicano de noticias La Silla Rota, exigieron también la liberación del periodista Roberto de Jesús Quiñones Hace, del portal Cubanet, condenado en septiembre a un año de prisión por supuestos delitos de "desobediencia y desacato".
El informe sobre Cuba presentado en la reunión de la SIP subrayó que "la cárcel vuelve a hacerse una realidad para el periodismo independiente", en referencia al incremento de arrestos temporales contra periodistas, cuyas garantías procesales no son respetadas.
Fernández Izaguirre estuvo detenido varias horas en mayo y nueve días en julio. Posteriormente fue arrestado en otras dos ocasiones y se le amenazó con ser enviado a prisión bajo la acusación de "usurpación de capacidad legal", delito del Código Penal que castiga, en este caso, la práctica del periodismo sin estar "debidamente habilitado" para ejercer esa profesión.
La SIP ha denunciado la intensificación de las detenciones, interrogatorios y las agresiones de diversas formas, incluyendo en el ámbito digital, así como la prohibición de salir de su lugar de residencia y del país.