Por un valor aproximado de US$200, las rutas del paisaje cultural cafetero en Colombia suman una nueva y atractiva oferta: observar el hermoso paísaje de la zona desde el mismo lugar de las aves.
El café es el motor del departamento de Quindío en Colombia. Ubicado en la región andina del país, la zona forma parte importante del llamado Eje Cafetero. En los últimos años el desarrollo de esta actividad no sólo ha movido los campos, también el turismo ha entrado con fuerza.
Desde el uso de antiguas fincas cafeteras, convertidas en hostales o pequeños hoteles, pasando por parques temáticos como El parque del Café, hasta las últimas de las sorprendentes novedades: el sobrevuelo en globos estáticos.
La oferta es potente y atractiva, ya que se invita a disfrutar de montañas, cafetales, naturaleza virgen y hermosos pueblos de arquitectura colonial desde los abiertos cielos de la zona. Durante 45 minutos el paseo muestra desde una perspectiva sin igual los campos donde se cultiva el café, declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco.
Contar con toda esa paleta de alternativas para los visitantes ha requerido, por cierto, aunar voluntades públicas y privadas, pero el desarrollo coordinado por la Cámara de Comercio de Armenia rinde frutos constantes. Uno de ellos, ser finalistas este año en la categoría "Innovación" de los premios que entrega la Organización Mundial del Turismo (OMT).
A juicio de la entidad global, las rutas del paisaje cultural cafetero poseen un perfil “innovador, competitivo y sostenible”.
El paseo en globos es, sin duda, una de las mayores novedades. Con una capacidad para cuatro adultos más el piloto, los vuelos salen a las 6 de la mañana desde las proximidades del Parque Nacional del Café en Montenegro.
Este punto en sí ya es llamativo: con una extensión de doce hectáreas, alberga un completo museo a la cultura del café, una finca en la que se cultivan varias especies del producto, una reserva nacional en la que se protegen especies endémicas y constantemente se están haciendo recreaciones de varias tradiciones como encomiendas tiradas por caballos, ferrocarriles de época y algunas áreas con teleférico.
El recorrido en globo se extiende por 45 minutos e integra los paisajes en los que se cultiva el café. Sin el ruido de un motor y a tantos metros de altura, la experiencia de observar la realidad desde el mismo lugar de las aves es claramente sobrecogedora.
Con un valor aproximado de US$154 por niños y US$195 por adultos, la experiencia incluye seguro de vuelo, la participación en el inflado del globo, fotografías, certificado de vuelo, café de cosecha, desplazamientos en 4x4 y desayuno típico.
La propuesta encaja perfecto con la nueva dinámica promocional del país, en la que en honor a Gabriel García Márquez se subraya que "Colombia es realismo mágico". Nada más sorpredente y atractivo que dar la vuelta al café en 45 minutos.