Laboratorio argentino Richmond sacó al mercado su versión del sofosbuvir. El tratamiento trimestral cuesta cerca de US$ 80.000 en EE.UU. En Argentina bajaría a menos de US$ 10.000.

El laboratorio argentino Richmond lanzó el primer presentó medicamento genérico contra la hepatitis C de la región. Con una tasa de cura del 90% y casi sin efectos colaterales, el sofosbuvir es parte de uno de los avances recientes más importantes en la medicina, ya que acaba con una enfermedad antes considera incurable.

La droga opera mediante la inhibición de la enzima polimerasa de ARN del virus. Se trata, la polimerasa, de una enzima es esencial para la multiplicación viral. Sin ella, éste se extingue. Otro elemento es que la droga es efectiva para el tratamiento de los cuatro genotipos (1, 2, 3 y 4) o variedades virales de la hepatitis C, en combinación con otros fármacos como ribavirina, daclatasvir u asociado a interferón. Y, con simeprevir, para el genotipo 1, el más común en el país de Río de la Plata.

El hecho de que esta versión sea genérica, podría significar la diferencia entre vivir y morir para muchos de los afectados, dado que en Estados Unidos un tratamiento trimestral tiene un valor que supera los US$ 80.000. En Brasil, las autoridades sanitarias, según la prensa argentina, lograron un acuerdo que permitió importarlo a un valor, por tratamiento, de US$ 10.000. En Argentina se espera que la cifra sea sustancialmente menor, lo que facilitará al ministerio de Salud su adquisición.

Al dar a conocer la salida al mercado del producto, cuya marca comercial es Probirase, los ejecutivos de Laboratorio Richmond indicaron que “compartimos la visión de un mundo donde la salud no sea un privilegio. Por eso, deseamos contribuir a mejorar, proteger y cuidar la salud de las personas”.