Desde que empezó este tipo de operaciones hasta hoy se han practicado en el Instituto Materno Perinatal 30 cirugía.
Un bebé que nace con espina bífida, es decir con un defecto en el cierre de la columna vertebral, tiene mayor probabilidad de hacer hidrocefalia, sufrir incontinencia y presentar problemas en su capacidad motora.
En cambio, si es sometido a una cirugía intrauterina cuando aún está en el vientre materno, las secuelas serán menores, ya no hará hidrocefalia, podrá caminar y se reducirá su incontinencia.
Este es uno de los beneficios de la cirugía fetal que se practica desde el 2014 en el Instituto Materno Perinatal (exMaternidad de Lima) del Ministerio de Salud, el único establecimiento público del país en desarrollar estas complejas intervenciones médicas.
Desde que empezó este tipo de operaciones hasta hoy se han practicado en el instituto 30 cirugías por espina bífida o enfermedades congénitas como anemia fetal, tumoración pulmonar en el feto, síndrome de transfusión feto-fetal y complicaciones en embarazos gemelares.
En diálogo con la Agencia Andina, el doctor Walter Ventura Laveriano explicó que estas malformaciones congénicas pueden presentarse en cualquier gestante, indistintamente a su edad o raza, pero más aún cuando hay antecedentes en la familia.
Explicó que no se conoce a ciencia cierta la causa de la espina bífida, pero -indicó- hay factores que lo condicionan, como la ausencia de ácido fólico en la alimentación de la gestante o un antecedente en la familia.
Otra dificultad que resuelve una cirugía fetal es la cuando los gemelos comparten una sola placenta (síndrome de transfusión feto-fetal). Cuando ocurre esto, un bebé crece más que otro, pero ambos están enfermos y necesitan ayuda.
"Cuando tenemos este problema, intervenimos y nos guiamos con una cámara pequeña; mediante una fibra láser se corta las comunicaciones vasculares, de tal manera que cada bebé tendrá su propia placenta", detalló Ventura.
La anemia fetal es otra razón para la cirugía intrauterina. Puede ocurrir cuando la madre tiene sangre RH- o cuando hay un tumor en el feto o en la placenta, lo cual poco a poco va quitándole sangre al bebé, generándose la anemia.
El galeno -ginecólogo con subespecialidad en medicina y cirugía fetal- aconsejó a las mujeres en edad fértil prepararse con medidas de nutrición y medicamentos antes de quedar embarazada.
"Tiene que acudir a un profesional para llevar embarazo de la mejor forma y detectar a tiempo si hay algún problema y, en caso sea necesario, referirlo a médicos fetales siempre que tengan la subespecialidad en medicina y cirugía fetal", añadió.
El experto aseguró que, gracias a las cirugías fetales, se ha mejorado la sobrevida de recién nacidos que durante la etapa de gestación presentaron alguna malformación congénita. "Si no se reparaban a tiempo el problema, podrían haber afectado gravemente a su desarrollo o producir enfermedades tras el nacimiento".