Un seminario en Guayaquil advirtió sobre las posibles enfermedades que puede traer el fenómeno climático al país.
El Universo. Enfermedades respiratorias y digestivas, por transmisión de vectores (como dengue, paludismo, malaria, chikungunya) y roedores son las que más aparecen o se acentúan con el fenómeno de El Niño en el país.
Así se indicó, la semana pasada, en el seminario-taller ‘El Niño 2015: Mitos, realidades y desafíos desde la información’, que ofreció el Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (Ciifen), en el centro de Guayaquil.
En la jornada, uno de los participantes también expuso el aumento de mordeduras de serpientes, sobre todo en las zonas agrícolas, ya que estas buscan zonas secas para protegerse de las lluvias o de inundaciones. Para esto último, se dijo que es vital la dotación de sueros antiofídicos, que ya no se producen en Ecuador, sino que se importan de países vecinos como Colombia.
“No cualquier suero antiofídico se puede traer, hay que traer una variedad que realmente le afecte a la culebra (a las variedades que existen en Ecuador) porque si no no funciona”, agregó el participante del sector agrícola del país.
Wladimir Ramírez, doctor de la Zonal 8 del Ministerio de Salud Pública, contó que en las ciudades se incrementan más las enfermedades respiratorias, por los cambios de clima bruscos. Esto afectaría más a grupos vulnerables, como a los niños y los adultos mayores de 60 años.
En cambio, en el campo, el agua entubada o que se almacena en tanques u otros recipientes suele contaminarse por las inundaciones o desbordamientos de ríos y esto hace que aumenten los problemas digestivos en este sector.
Otra enfermedad que puede incrementarse es la leptospirosis, que se produce por el contacto directo con la orina de roedores y otros animales infectados o con el agua o zonas que estos contaminaron.
Por ello, es importante utilizar zapatos para pisar las zonas húmedas o botas altas para pasar por zonas inundadas o por aguas estancadas.
También se hizo énfasis en la cocción de los alimentos, ya que el curtido (limón y sal) no es suficiente. Pusieron de ejemplo las enfermedades como meningitis, producida por el consumo de carnes y animales crudos, como los caracoles, que se dan más en zonas de la Costa.
También está la experiencia de otra enfermedad infectocontagiosa que se convirtió en epidemia en Ecuador, en el fenómeno de El Niño de 1997-1998: el cólera, que se desarrolla al ingerir agua o alimentos contaminados.
Ante ello, dijo Ramírez, es importante el manejo de las llamadas aguas seguras y que la ciudadanía aprenda a utilizar el cloro para que esta sea apta.
“Que en este momento no esté lloviendo en Ecuador no significa que no viene El Niño, sino que los efectos de El Niño todavía no se sienten en Ecuador”, aseguró Rodney Martínez, director del Ciifen.