Las empresas tecnológicas en el sector financiero están sacando gran provecho de la data de clientes de fuentes alternativas para colocar productos y servicios en un segmento al que a los grandes bancos les cuesta llegar. A su vez, la colaboración y sinergia entre fintechs y bancos abren aún más las posibilidades de bancarización en la población.
En economías altamente informales como las de América Latina, lograr el acceso a sofisticados productos financieros para el grueso de la población no bancarizada no es una tarea sencilla. No obstante, el poder de los datos que las fintechs manejan han marcado un interesante punto de partida para llevar más servicios a personas que no cuentan con un historial crediticio y que, por consiguiente, no son candidatos para recibir alguna oferta de tarjetas de crédito o préstamos de los bancos tradicionales.
De esta forma, el uso de datos o score alternativos para la calificación crediticia tomado en cuenta por las fintechs −como el pago de servicios básicos o alquileres− es una enorme oportunidad para que estas empresas abarquen gran parte de la población que no es considerada por las central de riesgo y mucho menos por la banca tradicional.
Según el estudio “Más allá del Fintech”, realizado por Deloitte y el World Economic Forum (WEF), si bien las instituciones financieras manejan cierta cantidad de información acerca de sus clientes, cuando se trata de monetizar este conocimiento o datos sobre ellos, las compañías de tecnología tienen el liderazgo.
“¿La razón? Se han movido más allá de los conjuntos de datos estáticos para combinar datos ricos, diferenciados, provenientes de múltiples fuentes, y usarlos en tiempo real. El potencial de este enfoque no se pierde en la industria de servicios financieros. Enfrentando un futuro donde los datos son crecientemente importantes, las firmas están comenzando a recaudarlos en flujos más que en instantáneas vía localización de datos a los que se accede a través de teléfonos más que de transacciones, por ejemplo”, dice el reporte.
Y es que es tal el alcance de la información que manejan estas empresas tecnológicas financieras que, según Eduardo Hernández, senior solutions architect para Latinoamérica de Huawei, gracias al gran volumen de datos y a la segmentación que se realiza en base a ellos, es posible que una vendedora de tacos incursione en el mundo de las finanzas invirtiendo en criptomonedas. “Con 300 pesos que tenga ahorrado puede incrementar su dinero en el corto plazo y obtener un beneficio importante”, dice Hernández.
De acuerdo con el ejecutivo, la mayor parte de la gente no cuenta con un score bancario porque nunca ha tenido la necesidad de ingresar dinero al sistema financiero, por lo que la oportunidad que tienen las fintechs para acercar productos financieros a este segmento es enorme.
“Los score alternativos de las fintechs nos van a ayudar a incrementar la base de personas que tienen un servicio financiero. La mayor parte de la banca tradicional quiere atraer a ese segmento de la población porque es un mercado que puede ofrecer un incremento bastante interesante de revenue, pero para captarlos u otorgarles un crédito necesitan tener un score dentro de sus historiales. Los score alternativos van a contribuir con la bancarización de América Latina para que las personas que están en una situación más vulnerable puedan directamente acceder a créditos en base a otras referencias que no son usadas por el sistema tradicional bancario”, dice.
En tanto, para Pablo Guzzi, CDO de Ualá, aplicación móvil argentina de gestión financiera personal, si bien el “santo grial” de las fintechs es generar inclusión financiera que el sistema tradicional no contempla, la información que estas manejan incluso ha acercado productos y servicios financieros a personas que ya estaban bancarizadas, pero que no podían usarlos porque era muy burocrático o difícil.
“Las fintechs nacen para motivar ese tipo de productos que no son muy incentivados. Nos ha pasado en Ualá que el producto de fondo de inversión lo usa la gente que lo podría haber usado en una banca tradicional y no lo ha hecho”, dice. “Centrándonos en lo que es la inclusión financiera, me parece que los score alternativos son parte del gran desafío, no alcanza todo lo que se sabe o se ha recolectado de datos para abarcar la problemática de esta industria. Se debe apuntalar un problema o una necesidad del sistema financiero atado a la innovación tanto de analítica como de datos y eso es parte de la sinergia en la que ganamos todos”.
Data compartida
En ese sentido, ambos ejecutivos −quienes participaron en el panel Manejo de datos: ¿Qué pueden lograr las Fintech con los datos que generan? del evento digital Ecosistema Fintech, organizado por AméricaEconomia− destacaron el potencial colaborativo y de sinergias de la data entre fintechs y grandes bancos.
“Para lograr una mejor colaboración y ayudar a las instituciones financieras tendríamos que abrir los datos. Actualmente hay varias estrategias, sobre todo en la industria insurtech, en las cuales muchas fintechs están colaborando con grandes instituciones bancarias para hacerles ver que no tienen la agilidad para sacar toda la información que tienen dentro de su data respecto al score de un seguro para determinado individuo. Las fintechs pueden colaborar para desarrollar la interconectividad y para que estas instituciones puedan vender el servicio de la información de los diferentes usuarios a compañías que pueden aprovechar ese tema. Por ahí debería ir el trabajo colaborativo”, dice Eduardo Hernández.
Por su lado, según Pablo Guzzi, el know how tecnológico que tienen las fintechs es un activo importante para todo el ecosistema financiero. “Ahí hay muchas sinergias que se pueden aprovechar y es un activo que se puede sacar mucho partido todavía, ya sea para ofrecer una mayor disponibilidad de información que permita a las personas acceder de forma transparente, masiva y segura a los datos y a los servicios financieros y que puede impactar en todo el circuito financiero, no necesariamente en una empresa, en un banco o en una fintech. Ese know how tanto tecnológico como de metodologías ágiles nos permite generar productos rápidos y tener un buen time to market. Tenemos mucho para aportar a la transformación digital del ecosistema financiero”, dice.
Sobre el trabajo colaborativo y las sinergias en la industria financiera el estudio de Deloitte y el WEF refiere que las fintechs están buscando ampliar los conjuntos de datos de sus clientes. “Una vía es hacer que la experiencia digital sea más comprometedora para los clientes, recaudando más datos en el proceso. Otro es trabajar en equipo con otras compañías, ofreciéndoles a los clientes valor adicional en intercambio por sus datos. En resumen, las instituciones están aplicando una combinación de estrategias que les ayude a alcanzar las compañías de tecnología y diferenciarse ellas mismas de otros proveedores”, dice el reporte.
Foto Piqsels.