Se trata de espacios laborales compartidos entre diferentes trabajadores que comparten un espacio físico.
El trabajo independiente libera a los profesionales de los límites que implica el trabajar en una empresa tradicional. Ser tu propio jefe, trabajar las horas que cada uno considere necesarias, la posibilidad de tener altos ingresos por proyecto y el poder trabajar desde cualquier lugar, son algunas de las características que atraen a cada vez más personas a esta tendencia laboral.
Para poder sacarle provecho a estas ventajas siendo freelance, se requiere de disciplina y constancia, tanto para organizar el trabajo, como para poder sacar adelante los proyectos y alcanzar objetivos. Parte de esta disciplina implica encontrar un lugar de trabajo adecuado, en donde cada persona se sienta cómoda y tenga a la mano todo lo necesario para desempeñar sus tareas.
Guillermo Bracciaforte, cofundador de la plataforma de contratación de freelancers Workana, explica que los espacios preferidos por los freelancers para trabajar se alejan de las oficinas convencionales. “La renta de una oficina es un gasto elevado al que no se le puede sacar provecho si se labora de manera independiente. Una sola persona va a tener problemas para sostener su renta mensual, y probablemente no sea la mejor opción si apenas comienza a formar su cartera de clientes”, explica el directivo.
Trabajar desde casa suele ser la primera opción para los profesionales independientes, pues no implica pagar una renta. Sin embargo, a algunas personas les desmotiva el aislamiento que puede darse al trabajar en casa, o bien, mezclan el tiempo dedicado al trabajo con las actividades del hogar, disminuyendo su rendimiento y la calidad de su trabajo.
Al trabajar fuera de casa, los freelancers suelen elegir entre dos opciones: lugares públicos como cafeterías, y espacios de coworking. La primera opción, si bien es tentadora por la posibilidad de estar en contacto con más personas y tener a la mano un café o un bocadillo en cualquier momento, también presenta desventajas como la imposibilidad de controlar el ruido externo, que puede desconcentrar a la gente, o bien, no tener garantía de una buena conexión a internet, factor indispensable para el desarrollo de las actividades de todo freelancer hoy en día.
Los espacios de coworking son, por otro lado, espacios laborales compartidos entre diferentes trabajadores, que además de compartir un espacio físico, presentan a los trabajadores independientes una serie de ventajas que los hacen una opción altamente recomendable para este sector laboral.
La primera de ellas es el costo, pues, al compartir gastos en renta y servicios con otras personas, resulta mucho más asequible alquilar un espacio de trabajo de acuerdo con las necesidades de cada trabajador, que puede ser por un determinado número de horas al día, por días completos, o incluso meses, a un precio mucho menor que la renta de una oficina.
Jorge Acevedo, fundador de The Place, espacio de coworking al sur de la Ciudad de México, explica que las ventajas económicas van más allá de la propia renta. “Un buen espacio de coworking ofrece diferentes amenidades que pueden ya estar incluidas en la renta, como café, espacios lúdicos y de descanso, salas de juntas e internet de alta velocidad, que, si se quisieran tener en casa, elevaría mucho los costos de operación para las personas”, señala.
Otra ventaja que presentan los espacios de coworking para los freelancers, es la posibilidad que otorgan de hacer networking y potenciar el crecimiento en las carteras de clientes. La convivencia con profesionales de distintas áreas, además de ayudar a los trabajadores a resolver dudas sobre temas específicos (como contaduría, diseño, mercadotecnia, etcétera), puede ayudar a que en un futuro se puedan realizar colaboraciones entre diferentes profesionales.
“En algún momento puedes requerir de un diseñador que te ayude con el logo para tu marca, o de un abogado que te asesore en temas legales. Además de poder encontrarlos de forma rápida al trabajar cerca de ellos, tienes la posibilidad de obtener buenos tratos comerciales con ellos, o hacer un intercambio de servicios. Todo depende de uno mismo”, explica el fundador de The Place.
Adicionalmente, un espacio de coworking brinda a los freelancers la posibilidad de incrementar su productividad, al separar su vida personal de la profesional. La Escuela de Negocios Ross de la Universidad de Michigan realizo un estudio donde observaron que los trabajadores eran más productivos al encontrarse rodeados de otras personas trabajando.
“Separar los negocios de los asuntos en el hogar, permite a la gente trabajar sin distracciones y enfocarse totalmente en sus tareas, para poder ocuparse de sus tareas en la casa después”, añade Bracciaforte.