Según investigadores de comunicación masiva, la creación de un avatar que se parezca lo más posible a su usuario humano puede motivar a éste a tener una vida más sana.
Los avatares, representaciones virtuales de un usuario humano, pueden tener más poder del que se conoce comúnmente. Eso, según un estudio reciente de la Universidad Estatal de Pennsylvania que demostró que la personalización de un personaje virtual podría llevar a una mejor salud y mejores hábitos de ejercicio.
"Hay un grupo creciente de investigaciones que sugieren que avatares virtuales son una forma efectiva para motivar a las personas a ser más sanas", dijo un candidato doctoral de la mencionada universidad, t. Franklin Waddell. Explicó que "nuestro estudio intentaba encontrar por qué los avatares tienen estos efectos y también determinar si pueden motivar a las personas a ser saludables, especialmente a aquellas que tienen menos interés en el ejercicio o en la comida sana".
En el estudio -publicado en la revista Cyberpsychology, Behavior and Social Networking- se pidió a 132 estudiantes de una universidad que crearan un avatar en Second Life, un popular juego de realidad virtual. Las personas que programaron sus avatares para tener su mismo género tenían mayores posibilidades de tener intenciones de hacer ejercicio y escogieron comportamientos más saludables, en comparación con las personas que crearon avatares del sexo opuesto. Además, tras personalizar sus avatares, tanto la gente que tenía conciencia sobre la salud antes como la que manifestaba menos cercanía con el tema tomó decisiones más sanas: por ejemplo, escogieron cupones de descuento para un club deportivo, en vez de para un restaurante de comida rápida, como compensación por completar el avatar.
"Nuestra investigación ha mostrado que personalizar un avatar puede hacer que los usuarios se sientan más enfocadas hacia un objetivo, y más empoderadas", dijo el profesor de Comunicaciones y co-director del Laboratorio de Efectos de los Medios, Shyam Sundar. "Este estudio muestra que incluso los individuos que no son normalmente conscientes en temas de salud se motivan a cuidar más su salud cuando personalizan un avatar de su propio género".
Para el investigador, el acto de crear un avatar parece crear una conexión personal entre la gente y sus alter egos virtuales. "Quizá lo más importante es que hay una sensación de empoderamiento que obtenemos cuando creamos esta persona virtual. Esa sensación se transfiere a nuestras motivaciones y acciones en el mundo real", dijo.