Pasar al contenido principal

ES / EN

Laura Ripani: “Hay que seguir trabajando para tener un mercado de educación laboral que dé mayores oportunidades de formación”
Lunes, Septiembre 2, 2019 - 15:33

La especialista en la División de Mercados Laborales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) analiza el futuro del trabajo, las tendencias y las principales problemáticas.

Desde hace poco mas de un año que el BID ha estado abordando desde múltiples ángulos los desafíos que presenta a personas, empresas y gobiernos el futuro del trabajo, tomando como premisas la creciente automatización laboral, la consiguiente pérdida de empleos, pero también la creación de nuevas ocupaciones.

Laura Ripani, especialista en la División de Mercados Laborales del Banco Interamericano de Desarrollo, da luces sobre cómo se está dando este proceso en América Latina y las necesarias alianzas y adecuaciones que todos deberemos hacer.

- ¿Cómo es que llega el BID a estos temas del futuro de trabajo?

Este tema empezó a tomar fuerza desde el año 2013 cuando un artículo que salió por unos investigadores de Oxford (Carl Benedikt Frey y Michael A. Osborne, en sept 2013) ellos hicieron la estimación y encontraron que en los próximos veinte años un 47% de las ocupaciones van a ser reemplazadas por robots. Y eso empezó la ola del temor a que los robots reemplacen a los humanos. 

Pero dicha estimación fue para Estados Unidos y a nosotros nos pareció muy importante el debate, porque había estudios para países desarrollados, pero muy poco para América Latina y el Caribe. Entonces, nos propusimos como Banco empezar por aumentar el conocimiento sobre el tema y por eso es que empezamos a hacer una serie de artículos en 2018  llamados “El futuro de trabajo en América Latina y el Caribe” que va a ser una serie que periódicamente publique un artículo nuevo sobre algún aspecto del futuro del trabajo en nuestra región. 

- ¿De qué se trata ese primer estudio, en particular?

El primer artículo tiene un formato que es bastante interactivo, con videos incrustados y gráficos interactivos; y lo que hablamos en el marco conceptual un poco de las tendencias fuertes que vemos que van a impactar al mundo laboral que son la ola tecnológica y el cambio demográfico y los impactos que se iban a ver en la región, de acuerdo con lo que nosotros pensamos va a ser de impacto más fuerte. 

Después empezamos a hablar de cuáles son las políticas más importantes que se deberían desarrollar para hacer un futuro del trabajo mejor para todos. En el BID apoyamos a los gobiernos en el desarrollo de políticas públicas, especialmente, pero también estamos en algunos países ya trabajando sobre el tema con el sector privado, en distintos aspectos.

- ¿Qué tendencias ven ustedes en esto? 

Vemos dos tendencias: no sólo es el cambio tecnológico, también el demográfico el que va a ser mucho impacto en cómo va a ser el mercado del trabajo en la región. Por un lado, la tecnología destruye empleos. Pero por otro lado también crea empleos y apoyan a que la gente, por ejemplo, consiga un empleo. El más famosos es el de las plataformas digitales como puede ser Uber, pero hay otras plataformas que generan empleo para las personas. 

Pero la pregunta del cambio tecnológico es más que nada respecto de quienes van a aprovechar esos cambios y muchas de las dudas que existen es si los cambios van a ser aprovechados por gente más preparada o educada para el cambio tecnológico y si esto puede generar mayores desigualdades en una región que ya es muy desigual. Entonces el miedo es que la tecnología genere más desigualdades en el mercado laboral y en eso hay que prestar atención, ponerle más posibilidades de entrenamiento aquellas personas que tienen menos acceso a formación para el trabajo, como para que no se quede atrás la gente que tradicionalmente se queda atrás en el mercado laboral.

Después está el desafío demográfico: pasar de un 10% de la población con 65 años o más a un 20% a países como Reino Unido o España les tomó cerca de 60-70 años y a los países de América Latina les va a tomar sólo 20. Entonces, uno de los miedos que existe es que por ejemplo los sistemas de seguridad social no estén preparados porque y muchos están en crisis y esa crisis se puede agudizar muchísimo ante un número muy grande de adultos mayores y esto también va a afectar los servicios de salud. Por otro lado, la oportunidad se genera en creación de empleos en el cuidado de adultos mayores en el cuidado de la salud que va a generar muchísimo empleo, así como se generó en Estados Unidos.

- ¿Con qué gobiernos han trabajado, podrías mencionar casos concretos?

Te mencionaré algunos de los países con los que estamos trabajando solamente para ilustrar un poco de qué forma estamos apoyándolos a generar un mejor futuro del trabajo. 

En Bahamas estamos más que nada relacionándonos con el sector privado en tres sectores específicos para hacer un programa de aprendizaje en el lugar de trabajo para generar la formación para el trabajo que más demanda tiene en el país:  tecnología de la información, el sector marítimo y el sector salud. Es un programa de aprendices para tener gente formada para esos empleos hoy y también para generar un pipeline, un continuo de trabajadores que van a poder trabajar para esos sectores que son los sectores que más demanda laboral tienen.

En Perú estamos implementando algo que se hace en países fuera de la región con éxito, que son los consejos sectoriales de habilidades: grupos de empresarios que generalmente están las cámaras de empresarios involucradas. Con ellos se hace una estimación de la demanda de habilidades, categorizados según cada sector, se evalúa cómo se va a mover a futuro la demanda de habilidades en los determinados sectores y entonces en base a eso se hace toda la planificación de la capacitación para el trabajo, para que las personas también se puedan ir ocupando y formando en estas ocupaciones con futuro.

En el área de la intermediación laboral, de apoyo a las transiciones laborales, en Paraguay lo que se hizo fue instalar un sistema Inteligencia Artificial para hacer la conexión entre lo que serían las ofertas de empleo y las demandas de empleo. Opera como los sistemas de bolsas de empleo tradicional, pero en vez de usar una persona que hace la conexión ahora lo hace un sistema de Inteligencia artificial, lo que ha sido mucho más valorado por los empresarios y está teniendo bastante éxito. 

- ¿Crees que es importante que América Latina y el Caribe repiense la forma de regular el mundo laboral? ¿por qué?

El panorama que tenemos que las regulaciones laborales y las leyes de la región son del siglo XIX y no están adaptadas para el mundo que se viene el mundo que se viene es el de las plataformas digitales, de las firmas que tercerizan mucho más el trabajo, haciendo contratos de servicios temporales… es un mundo que es muy diferente al siglo XIX y al XX.

- ¿Cuál sería el cambio deseable a futuro?

Estamos construyendo nuestra visión para apoyar a los países a repensar las regulaciones y las leyes laborales, porque sentimos que hay mucha ausencia de debate en ese tema, mucha lentitud también para hacer esos cambios, y es como que el mercado laboral arrasa: la realidad viene fuerte y suele ocurrir que la política va más lento ante los cambios.

En lo que queda de este año y el año que viene vamos a publicar artículos que están relacionados a ese tema. Uno es sobre el estado de las regulaciones laborales en la región, mirando como están haciendo ese cambio fuera de la región y el otro es como se está trabajando el tema de las economías de plataforma el continente, porque se sabe algo de cómo está funcionando en Estados Unidos y en Europa, pero en la región todavía no se tiene claridad, por ejemplo, ¿cuántas personas son, dónde trabajan, cómo trabajan, cuánto tiempo trabajan, son hombres, son mujeres, están en Colombia, en Argentina, en Chile? Todo eso lo llevamos a tratar de dilucidar, queremos hacer una fotografía sobre cómo está la situación ahora y hacer un análisis a través de las oportunidades y riesgos de las plataformas.

Otro que tenemos previsto es uno de automatización en el empleo, para saber si hay un impacto negativo o no en el empleo en al menos tres países de la región, porque nos parece importantísimo empujarlo bien y fuerte en la región, ya hay varios países que tienen presente el tema, pero hay mucha falta de información sobre dónde estamos parados.

- En cuanto al futuro del trabajo, parecen haber dos visiones contrapuestas: precarización extrema en el pesimista y, en un escenario  optimista, se apuesta por mucho mejores empleos que los actuales. Sin embargo, las cosas suelen terminar siendo un poco de ambas, ¿cómo lo ven como lo ven ustedes? 

Creo que las dos visiones, los dos escenarios van a convivir al mismo tiempo. 

En mayor o menor medida que hay una parte de la población que va a ser afectada negativamente, al menos en el corto plazo, y eso es lo que ha pasado con las otras revoluciones anteriores a esta Cuarta Revolución Industrial, donde hay un período de transición y de ajuste. Y ahí parte de la población que es más afectada que otra, entonces uno de los miedos es que sin las políticas adecuadas tengamos más de las personas que han sido relegadas o que estén en peor situación que antes. 

Lo que creemos es que el futuro es algo moldeable, no es algo fijo como una foto que dice este es el futuro de trabajo y se acabó. Tenemos que ir hacia allá, si se hacen las políticas adecuadas podemos ir un poco más a la mejor dirección y para eso, desde las políticas públicas, hay que tener mucho más apoyo a esas personas que tienen menor información sobre el mercado laboral que no saben qué carrera van a tener mayor demanda a futuro, que no saben cómo entrenarse, que tienen ciertas barreras, como podrían ser las clásicas de financiamiento para alcanzar formación para el trabajo. Entonces, dar ese apoyo es importante, porque si no es como que dejamos todo en statu quo y vamos a tener a personas que tienen mayores posibilidades de entrenarse, pero un montón de personas las vamos a dejar afuera y eso va a aumentar la desigualdad.

También es importante tener más información, no solamente desde el lado del individuo, sino de tener un sistema de formación que provea formación de calidad y que sea relevante. 

- También está el viejo problema de las urbes latinoamericanas, donde, aunque tú sepas lo que quieres estudiar o lo que demanda el país, hay algunas barreras de entrada para estudiar una profesión que tienen que ver con el dinero, porque la educación no es gratuita en todos los países de nuestro continente, entonces claramente no todos van a poder optar a estudiar esas profesiones más valoradas

Sí, es ahí donde hay que seguir trabajando para tener un mercado de educación laboral que dé mayores oportunidades de formación, donde se valore más la formación técnica no sólo la formación Universitaria. Y que se esa formación técnica sea accesible también, que se valore también el valor de los oficios por ejemplo con certificación de oficio para que no sea todo siempre tener una carrera Universitaria. 

Hay otros países como Alemania, Suiza, Austria Australia, Nueva Zelandia, con un sistema mucho más completo de oportunidades de formación y que no se restrinja tampoco solamente a la niñez y la juventud sino de toda la vida uno puede certificar sus saberes y además seguir avanzando con nuevas oportunidades de formación, porque el sistema de América Latina y el Caribe es muy como que valora mucho el nivel universitario pero a veces no es alcanzable por mucha parte de la población y es como que bueno la otra opción ya es ir a trabajar sin formación y no hay una opción intermedia, que es la educación técnica de calidad. 

Entonces, por supuesto que todo el tema financiamiento hay que seguirlo pensando cómo darnos mejor acceso a educación Universitaria porque obviamente es algo valorarlo valorado y valorable pero también abrir más el espectro de opciones para que no todo recaiga en la universidad además otra de las cosas que se discute mucho es cómo va a ser el cambio futuro de las universidades si va a ser igual que el rol que tienen hasta ahora o si vas a cambiar dado que el mundo está cambiando constantemente.

Lo importante es para todos es que, desde el punto de vista de los individuos es aprender a aprender, a estar abiertos a aprender nuevas habilidades y tener mayor flexibilidad, porque los cambios en el mundo laboral van a ser mucho más continuas y fuertes y uno va a tener que estar más abierto a aprender, porque si no va a perder el juego ya.

Autores

Gwendolyn Ledger