Una completa renovación de imagen de su línea Reserva mostró la viña chilena Caliterra, un look cuyo atractivo visual -según sus creadores- le da aires contemporáneos, refresca y revitaliza la gama.

 

El nuevo diseño resaltando las cualidades de rusticidad, sustentabilidad y naturalidad que identifican a la bodega del valle de Colchagua, fruto del proyecto conjunto entre el viñatero estadounidense Robert Mondavi y la viña Errázuriz.

 

El trabajo refleja, además, uno de los pilares fundamentales de Caliterra: su compromiso con el cuidado al medio ambiente y la importancia de los detalles en la producción de sus vinos.

 

Según agregaron desde la firma, la etiqueta describe a su vez una historia muy particular: la del árbol nativo quillay, de follaje siempre verde y que se extiende por el viñedo y laderas de bosque de Caliterra, conformando junto a otras especies nativas una magnífica biodiversidad.

 

Viña Caliterra fue pionera en el desarrollo de la vitivinicultura sustentable chilena, tras crear un protocolo de sus prácticas que luego fue la base para el Código Nacional de Certificación que impulsa actualmente la gremial Vinos de Chile.

Agencias