La nueva tecnología de GE Healthcare permite la obtención de distintas secuencias de imágenes para reconstruirlas de forma más precisa.
El cáncer de mama es la primera causa de muerte entre mexicanas mayores de 25 años, de acuerdo a datos recientes de la Secretaría de Salud. Al año, se estima que se detectan más de 20 mil casos con una incidencia de 35.54 por cada 100.000 mujeres; en 2012, entre mujeres mayores de 25 años se registraron 5.583 defunciones, con una tasa cruda de 17,1 defunciones por cada 100 mil mujeres. Solamente entre 5 y 10% de los casos de cáncer de mama se detecta en las fases iniciales en México, en comparación con el 50% que se detecta en los Estados Unidos.
Ante estas cifras alarmantes, la industria médica ha enfocado sus esfuerzos en los últimos avances en tecnología en detección temprana. Es por esto que GE ha lanzado en México una nueva tecnología en mamografía que hace que la experiencia para las pacientes sea más cómoda, ya que son ellas mismas quienes hacen la compresión teniendo el control total. Como resultado, se obtienen imágenes más profundas y definidas donde los médicos realizan diagnósticos más exactos.
Adicionalmente, la tecnología de diagnóstico de GE Healthcare, produce imágenes mucho más precisas del interior de la mama en comparación con los mamógrafos tradicionales, lo que resulta importante por muchas razones.
Una de ellas es que cerca de 40% de las mujeres en el mundo tienen mamas densas, es decir, un tipo de mama que al tener mayor presencia de tejido mamario dificulta la detección temprana a través de una mamografía. De acuerdo con el estudio “El valor del conocimiento” de GE Healthcare, las mujeres con esta característica tienen 4 a 5 veces más riesgo de desarrollar cáncer de mama.
En ese sentido, la nueva tecnología de GE Healthcare permite la obtención de distintas secuencias de imágenes para reconstruirlas de forma más precisa. Durante el procedimiento, el radiólogo posiciona a la paciente en el mamógrafo, y la mujer es quien ajusta los niveles de compresión de acuerdo a su propia sensibilidad. Curiosamente, al tener ellas el control, pueden presionar aún más que lo que haría un técnico, y lograr imágenes más nítidas para un diagnóstico más asertivo, lo que beneficia especialmente a mujeres con mamas densas.
De acuerdo con Aurelie Boudier una de las diseñadoras de esta tecnología describe que su filosofía es desarrollar ciencia con empatía hacia las pacientes, es decir, construir una máquina que cambie la percepción sobre la mamografía y tranquilizar a las mujeres.
Las experiencias con la tecnología de diagnóstico de GE Healthcare en otros países han mostrado resultados muy positivos. En GE Healthcarerealizaron una encuesta con 272 pacientes que usaron este mamógrafo en Estados Unidos, de las cuales la mayoría (83%) respondió que su experiencia fue muy satisfactoria comparada con la que han tenido en mamografías con máquinas tradicionales. El sentir menos dolor, ansiedad y mayor comodidad, las hizo aceptar que podrían hacerse el mismo examen en el futuro.
Estas razones son las que se verán reflejadas en México a la llegada de este mamógrafo, pues representa una vía para que cada vez más mexicanas se realicen su examen de diagnóstico y prevenir el cáncer de mama.