El nuevo fenómeno musicales mujer y tiene un nombre extrañe. Se llama Lorde y es una neozelandesa de 17 años, que ha hecho sonar en todo el mundo su éxito "Royals". Después de conseguir dos premios Grammy, se perfila como cantante prometedora que, con su actitud, se escapa del típico perfil de estrella juvenil.
El pasado marzo Bruce Springsteen sorprendió al público de uno de sus conciertos en Nueva Zelanda interpretando una versión acústica de "Royals". De esta forma, The Boss se suma a la lista de personas que se han visto atrapadas por esta pegadiza canción, firmada por un nombre que hasta hace poco era desconocido pero que ahora resuena tanto como sus composiciones: Lorde.
Ella Marija Lani Yelich-O'Connor es su nombre real. Y 17 años con los que ha alcanzado fama mundial. Con sólo un disco en su haber, "Pure heroine" (2013), y su primer "single" como bandera -el citado "Royals"- el éxito rebasa a esta artista, que ha visto reconocido su talento con dos Grammys (a la mejor canción del año y a la mejor actuación pop solista) y un Brit Award a la mejor artista internacional femenina.
El videoclip de "Royals" ha superado la barrera de los 200 millones de visitas en Youtube, su disco se situó en su lanzamiento en el primer puesto de iTunes y ha encabezado las listas de ventas de todo el mundo. Lorde es una de las últimas confirmaciones del Rock in Rio Lisboa, que comenzará mayo; fue un show destacado también en la estación de Santiago del Lollapalloza. Todos datos que consagran a la neozelandesa como la nueva estrella de moda.
Sin embargo, Lorde no es un fenómeno juvenil corriente. Su imagen como artista y su actitud, reivindicativa y en ocasiones cercana a la polémica, la aleja de otros iconos adolescentes, como por ejemplo Justin Bieber, Selena Gomez o -en su día- Miley Cyrus. Pero, ¿qué es lo que le hace diferente?
SIN PELOS EN LA LENGUA
Ya lo destacó el cantante Keith Urban, cuando mostró su admiración por ella: las composiciones de la neozelandesa tienen una profundidad que no se encuentran en las en las de otros intérpretes de su edad. Y es que las canciones de Lorde no giran únicamente alrededor del amor y desamor.
Ella misma confesó a MTV News que su línea va, definitivamente, por otro lado: "Creo que las influencias que hay en la industria para gente de mi edad, como Justin Bieber o quien sea, quizá no son una descripción muy real de cómo es ser una persona joven", dijo con meridiana claridad.
La cantante demuestra que no tiene pelos en la lengua, y no se corta a la hora de decir públicamente sus ideas, tanto de cara a los medios como en las redes sociales. Revuelo levantó cuando respondió en Twitter a la estadounidense Westboro Baptist Church, conocida por su activismo antigay, cuando amenazaron con realizar una protesta a las puertas de uno de sus conciertos en Kansas.
Ante esto, Lorde lanzó unos tuits -que eliminó posteriormente, pero que los medios tuvieron tiempo de recoger- en los que invitaba a sus seguidores a acudir al espectáculo con ropa de colores e intentar besar a miembros de la iglesia del mismo sexo.
TU HEROÍNA
La neozelandesa también se valió de la misma red social para abanderar otra de sus causas: la lucha contra la perfección que impone la sociedad y especialmente los medios de comunicación y el temido (y amado para otros) Photoshop.
Para ello, subió dos fotos suyas tomadas el mismo día, una retocada y otra sin retocar; una en la que su piel era "perfecta" y otra en la que era "real". Así, hacía un llamamiento a sus seguidores para que entendieran que "está bien tener defectos".
Son este tipo de cosas las que hacen que Lorde se perfile hoy como una celebridad diferente, que bien puede servir como ejemplo para que muchos jóvenes no se dejen llevar por los patrones establecidos.
De momento, su carácter ha inspirado al escritor superventas Marc Shapiro, especializado en biografías de famosos, quien ha escrito un libro sobre su figura. Y el título ya capta toda la esencia de la cantante: "Lorde, tu heroína. Cómo esta joven feminista rompió todas las normas y triunfó".