Con libros que hacen parodias de autores como Tolkien, Lovecraft o Shakespeare, y también de la mitología y cuentos de hadas, el autor jugó a hacer paralelismos satíricos con temas culturales, tecnológicos o científicos actuales.
"Mundodisco" es una saga literaria creada por Terry Pratchett. que parodiando la literatura fantástica y heroica, habla -precisamente- de fantasía y heroísmo. Con casi cuarenta libros, la historia genera un culto muy particular en sus seguidores, ubicando a su autor entre los primeros lugares de ventas y ganancias, siguiendo de cerca a su compatriota J.K. Rowling y su saga "Harry Potter".
Con un Alzéhimer que lo tenía postrado desde 2007, se confirma este jueves la muerte de Pratchett, quien logró superar 40 millones de libros vendidos.
Desde Tolkien hasta Conan, "Mundodisco" parodió con una ironía fina e intensa todo el mundo de la literatura fantástica, generando una obra siempre entretenida y que resume con precisión los intereses del autor inglés. Pratchett tuvo siempre un don para escribir comedia, pero jamás abandonó la esencia de la ciencia ficción.
Los hechos transcurren en el Mundodisco, un mundo plano sostenido por cuatro elefantes que, a su vez, se apoyan en el caparazón de Gran A'Tuin, la tortuga estelar. El escenario es medieval fantástico, aunque algunas partes del mundo están ambientadas en la era victoriana a lo largo de la serie.
Los libros frecuentemente hacen parodias, o al menos toman ideas prestadas, de autores como Tolkien, Howard, Lovecraft o Shakespeare, y también de la mitología, relatos tradicionales y cuentos de hadas, utilizándolos a menudo para establecer paralelismos satíricos con temas culturales, tecnológicos o científicos actuales.
Pratchet -quien también creó novelas juveniles, relatos cortos y colaboró activamente en los guiones para adaptar sus historias al cine y la televisión- dio a conocer, en su estilo, durante el mes diciembre de 2007 que padecía un Alzéhimer prematuro.
"Si bien reconozco estga enfermedad, no estoy muerto. Al menos todavía. Por supuesto, estaré muerto. Pero espero que sea más tarde de lo que esta enfermedad piensa", comentó en esa oportunidad.
La muerte del prolífico autor se produjo en su casa cerca de Stonehenge, en Salisbury (Wiltshire), donde vivía con su mujer Lyn y su hija Rhianna Pratchett, también escritora.