De acuerdo a un informe de Page Group, dos de cada diez colaboradores reciben contraofertas laborales.
En los cargos que más se da este fenómeno son en las posiciones más especializadas y con poca probabilidad de reemplazo. Así, Juan Ignacio Silva, gerente de Recursos Humanos de Argentina, Chile, Colombia y Perú de PageGroup, compañía especializada en reclutamiento, explicó que:
“Este fenómeno se genera cuando el empleador valora que la pérdida del conocimientos versus el tiempo de entrenamiento es demasiado alto o costoso para la empresa”.
Según el experto en reclutamiento, las contraofertas laborales son más comunes en ciertas áreas de empresas que en industrias determinadas del mercado, como por ejemplo: Tecnología, impuestos, desarrolladores, ingeniería. Así, según estimaciones de PageGroup “Un 30% de los de los profesionales de implementación de sistemas muchas veces reciben contraoferta, así mismo, un 20% de los profesionales de ingeniería o cuestiones duras también y, un 30% de los profesionales de las áreas comerciales con cartera de clientes formadas y fidelizadas son otros de los cargos tentativos para realizar esta práctica”.
Sin embargo, según Silva, antes de aceptar una contraoferta laboral, recomienda que el colaborador evalúe siete factores para decidir si ésta le conviene o no:
1. Dinero (paquete de remuneración fijo y variable).
2. Prestigio de la organización.
3. Ambiente laboral.
4. Plan de carrera ofrecido.
5. Tarea que realizará el colaborador.
6. Balance entre vida y trabajo que ofrece
7. Otra variable para algunas generaciones puede ser importante a considerar es la la distancia de trabajo – hogar.
Así, si el colaborador decide aceptar la contraoferta “la mejor manera de poder anunciar esta decisión al empleador es exponer los siete puntos planteados anteriormente y justificarlos uno por uno con una conclusión final”, concluyó Silva.