Entre los viajeros jóvenes, Curazao es uno de los destinos preferidos, con sus más de más de 36 playas.
Las personas que nacieron entre la década del 80 y el inicio de los 2000 llamados “Millennials”, cada vez revolucionan más las diferentes maneras de consumir, actuar, y viajar es por eso que buscan nuevos lugares por conocer y tener experiencias únicas en los cuales puedan disfrutar de diferentes actividades que vayan acorde a su estilo de vida.
Según cifras de Curazao, durante el 2018 se recibieron 125.406 (29 % del total) de visitantes con edades entre los 20 y 35 años para un total de visitantes de stayover en 2018 de 431,707. Durante los tres primeros meses del 2019 se han recibido a 33.391 (26,3% del total) de visitantes de 20 a 35 años de edad.
Estas cifras demuestran como la isla, sigue consolidándose como un destino ideal para los Millennials, una isla que reúne una completa diversidad de actividades para todos los gustos: nadar con delfines, bucear, hacer caminatas, snorkel, disfrutar de los mejores restaurantes, conocer museos, entre otros.
Sin lugar a dudas, para los pertenecientes a esta generación y cualquier viajero, el lugar en donde pasen su estadía en su destino soñado, es un tema muy importante, es por eso que escoger un hotel que reúna todo lo que se busca es un factor clave en el viaje, tener su habitación cerca a la playa, restaurantes, y muchas actividades por hacer.
Uno de los hoteles más reconocidos por acoger a estos viajeros que buscan descanso, explorar y por supuesto pasar unas buenas vacaciones, se encuentra el Livingstone Jan Thiel Resort que está ubicado en el área Jan Thiel, una de las playas más reconocidas en Curazao, con aguas cristalinas, arena suave y una vista inimaginable, en donde también podrá pasar una excelente tarde viendo como cae el sol.
En la playa encontrará actividades como músicos locales tocando los mejores éxitos en versiones acústicas, mercados de pulgas, muestras de teatro y cabaret. Después de ello, los bares están a disposición para ofrecer lo mejor de la coctelería y música para que la fiesta no pare.
Los restaurantes que se encuentran allí son los imperdibles de la Isla, en donde se podrá tener los mejores platos locales e internacionales. La oferta va desde comida mediterránea, argentina, street food, juguerías y heladerías.
Otras actividades que disfrutan este nuevo segmento de viajeros es hiking, practicar y tomar clases de buceo o pasar una tarde en las dunas de Curaçao montados en cuatrimotos.