Psicóloga cognitiva de la Universidad de Yale plantea que también serían "mejores para aprender de la gente que nosotros mismos".

Para demostrar los niveles de racionalidad de los perros, Laurie Santos, psicóloga cognitiva de la Universidad de Yale, decidió subir a un escenario rodeado de público y mostrar una particular situación.

Según relata la revista científica Live Science, ante los espectadores de la Gala 2018 del Liberty Science Center, la especialista mostró cómo abrir una caja con una manilla cilíndrica.

Para esto, sacudió el agarradero varias veces y luego, sin mayor esfuerzo, abrió la tapa. Así, repitió la actividad en varias ocasiones para demostrar “cómo se abre una caja”.

Pero había una trampa que, probablemente, pocos notaron. Y es que la manilla no estaba conectada de ninguna forma con la cubierta, por lo que sólo era necesario levantar y abrir.

El momento de asombro llegó minutos más tarde, cuando Santos llamó a un perro al escenario. Para su participación en el experimento, la experta le mostró cómo abrir el cubículo (“usando” la manilla”). Si la mascota comprendía el juego, sería recompensado con un premio.

Para sorpresa de todos, el perro olfateó la caja y la abrió con la nariz sin tocar la manilla. El animal había confiado en sus instintos.

Más tarde, Santos explicó a la revista especializada Live Science que “los perros son realmente buenos para aprender de nosotros, pero podrían, de manera divertida, ser mejores para aprender de nosotros que nosotros mismos“.

La experta del Laboratorio Canino y de Primates de Yale añadió que los humanos somos víctimas de intentar imitar situaciones tal como las vimos, cuestión que en la ocasión no realizó el animal.

“A veces imitamos demasiado; somos tan propensos a confiar en los demás que copiamos las cosas que los vemos hacer, incluso cuando las cosas que hacen otras personas pueden no ser tan inteligentes”, puntualizó.

Si bien la actividad se trató sólo un experimento, según Santos “debería proporcionar elementos de reflexión para la próxima vez que se plantee un problema canino o se cuestionen las decisiones de un perro”.