Miembros del llamado Ejército del Pueblo Paraguayo son señalados como los responsables de al menos cuatro secuestros desde 2001, el último de un empresario liberado este domingo.
Asunción. El presidente paraguayo, Fernando Lugo, ordenóeste miércoles el envío de fuerzas militares al norte del país paraapoyar a la policía en la captura de una banda de extrema izquierda queha sembrado el terror en la zona.
Miembros del llamado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) sonseñalados como los responsables de al menos cuatro secuestros desde el2001, el último de un empresario pecuario liberado el domingo luego detres meses de cautiverio.
El hecho conmocionó a la sociedad paraguaya, poco acostumbrada aeste tipo de delitos, y sembró la alarma entre la población por laposibilidad de que el grupo crezca y se convierta en una guerrillasimilar a las FARC de Colombia, con las que se cree tendrían vínculos.
"He solicitado como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de lanación (...) autorizar y ordenar la participación de las fuerzasmilitares en apoyo a los efectivos de la policía nacional", dijo Lugoen una rueda de prensa.
El Gobierno lanzó el lunes un operativo policial en el norte para lacaptura de los responsables del secuestro del ganadero Fidel Zavala ydetuvo el martes a nueve personas, en medio de críticas de la oposiciónque exigía acciones más rigurosas.
El envío de los militares corresponde a la segunda fase deloperativo, y según Lugo "se embarca en un proceso global de apoyo aldesarrollo (...) a las poblaciones de la región".
El ministro del Interior, Rafael Filizzola, dijo que tropas de élitedel Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea ayudarán a la policíaaportando logística y en tareas de inteligencia.
Organizaciones de izquierda pidieron cautela a los organismos deseguridad para evitar que se produzcan excesos y se desate una "caza debrujas", en tanto legisladores opositores se mostraron en general deacuerdo con la medida.
El EPP estaría integrado por una veintena de personas quereivindican la lucha armada para cambiar el sistema y operan en zonasboscosas de difícil acceso en una región productora de marihuana dondeel Estado está prácticamente ausente. La banda recibiría apoyo dealgunas comunidades campesinas.
Zavala fue secuestrado a mediados de octubre de su hacienda en eldepartamento Concepción, a unos 500 kilómetros de Asunción, y liberadotras el pago de unos 550.000 dólares. El EPP exigió a la familiarepartir carne entre los pobres.