Once soldados brasileños que trabajaban para la fuerza de paz de la ONU en Haití resultaron muertos por el fuerte sismo país y muchos otros estaban desaparecidos.
Brasilia. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo que se siente consternado por el terremoto que sacudió este martes a Haití y lamentó la muerte de haitianos y brasileños.
Once soldados brasileños que trabajaban para la fuerza de paz de la ONU en Haití resultaron muertos por el fuerte sismo país y muchos otros estaban desaparecidos, dijo el Ejército brasileño.
"Transmito mi pesar y mi total solidaridad al pueblo haitiano y a la familia de las víctimas brasileñas, civiles y militares, en especial a la de Zilda Arns", declaró. "Que Dios dé consuelo a todos en este momento doloroso", añadió.
Lula hacía referencia a una pediatra de 75 años y fundadora de Pastoral da Crianca, un organismo de acción social dependiente de la conferencia episcopal brasileña, cuya muerte fue confirmada por la oficina del senador Flávio José Arns, sobrino de la mujer.
"Ella estaba caminando junto a un militar en la calle (...) Se produjo el terremoto y los escombros la alcanzaron", confirmó María José Camargo, asesora de la oficina del senador, quien añadió que el militar que acompañaba a la doctora también falleció.
El ministro de Defensa, Nelson Jobim, y el comandante en jefe del Ejército brasileño, Enzo Peri, viajarán este miércoles a Haití.
El general de Ejército Carlos Barcellos dijo previamente en una rueda de prensa en Brasilia que muchos soldados brasileños estaban desaparecidos y que muchos civiles han acudido a bases militares en busca de ayuda humanitaria.
Uno de los edificios en los que vivían tropas brasileñas "colapsó completamente" y los soldados buscaban sobrevivientes, dijo la Cancillería en un comunicado.
Brasil encabeza el contingente de tropas de paz de la ONU desplegadas en el 2004, después que una rebelión de bandas de ex soldados forzó la renuncia del presidente electo Jean-Bertrand Aristide.
Brasil tiene 1.266 soldados y fuerzas de la Armada en Haití como parte de un contingente multinacional de unos 9.065 efectivos de varias naciones, desde Jamaica hasta Sri Lanka.
Con información de Reuters