El denominado 'tope' se instituyó como una reforma a la Constitución, se necesitaría otra medida parecida que requeriría del apoyo de las tres quintas partes de los diputados y senadores para eliminar la norma.
El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva volvió a decir este viernes que, de ser elegido como próximo mandatario de Brasil, no tendrá tope de gasto en el presupuesto del país.
"No es bravuconería, pero no habrá tope de gastos en nuestro país", dijo Lula en una reunión con trabajadores de la salud.
Lula ha repetido que no mantendrá el límite presupuestario, pero cualquier cambio depende de la negociación con el Congreso.
El tope se instituyó como una reforma a la Constitución, se necesitaría otra medida parecida que requeriría del apoyo de las tres quintas partes de los diputados y senadores para eliminar la norma.
El jueves, en un acto realizado por XP Investimentos, el presidente de la Cámara baja, Arthur Lira (PP-AL), recordó que quien resulte electo tendrá que negociar cualquier cambio con el Congreso.
"De nada sirve que el candidato 'A', el candidato 'B' o el candidato 'C' digan que 'no estoy de acuerdo con esto, que voy a desprivatizar aquello, o que voy a desmaterializar un reforma constitucional que hizo el Congreso Nacional'.
Las cosas habrá que discutirlas, dialogarlas, democráticamente, como es nuestro proceso electoral", dijo Lira.
El propio Lira sin embargo, abrazó los cambios que permitieron al actual gobierno de Jair Bolsonaro eludir el techo de gasto para aumentar el programa de gastos Auxílio Brasil en un año electoral.
Lula también dijo que el tope fue creado sólo para evitar aumentar los presupuestos para programas de salud, educación y renta.