De los US$4.500 millones desviados de 1MDB, US$1.000 millones fueron blanqueados en EE.UU. con la compra de inmuebles, yates, joyas y obras de arte.
Exempleados de Goldman Sachs han sido relacionados con la trama de corrupción de la firma malasia 1Malaysia Development Berhard (1MDB), por la que va a ser juzgado el ex primer ministro Najib Razak.
El fiscal general de Malasia, Tommy Thomas, anunció que, en los tribunales del país, se han presentado cargos penales contra subsidiarias de Goldman Sachs, en relación con la trama de corrupción de la firma malasia 1Malaysia Development Berhard (1MDB).
Serán imputados "en breve" Tim Leissner y Roger Ng Chong Hwa, exempleados de Goldman Sachs, por su participación en las tres series de bonos por un valor total de US$6.500 millones, que 1MDB emitió a través de su institución, según el comunicado oficial difundido el lunes.
El fiscal general detalló en la nota que ambos "incitaron" a Low Taek Jho, empresario más conocido como Jho Low, y a Jasmine Loo Ai Swan, ambos de 1MDB, a sobornar a funcionarios para que Goldman Sachs obtuviese el contrato de los citados bonos.
También serán imputados Loo Ai Swan y Jho Low, considerado una de las figuras claves en la trama del 1MDB, por la que va a ser juzgado en Malasia el ex primer ministro Najib Razak.
Tim Leissner, Roger Ng Chong Hwa, Jasmine Loo Ai Swan y Jho Low presentaron además declaraciones falsas o engañosas con el objetivo de malversar 2.700 millones de dólares (2.383 millones de euros) de los fondos de los citados bonos, según el fiscal general.
La primera serie, por US$1.750 millones, la emitió 1MDB Energy el 18 de mayo de 2012; y la segunda, por la misma cantidad y el mismo emisor, salió a la venta el 17 de octubre de 2012. La tercera, de 1MDB Global Investments, es del 16 de marzo de 2013, con un fondo de US$3.000 millones.
Goldman Sachs cobró oficialmente por la operación "aproximadamente" US$600 millones, más de lo habitual, sin contar el capital malversado y las comisiones recibidas por los directores y empleados de la compañía, según el comunicado oficial. El fiscal general indicó que pedirán una pena máxima de 10 años de prisión para cada imputado.
Najib creó 1MDB en 2009, tras llegar a la jefatura del Gobierno, como una herramienta del Estado dedicada a atraer proyectos de inversión y desarrollo beneficiosos para el país.
La trama de corrupción salió a la luz en 2015, cuando varios medios denunciaron que unos 2.600 millones de ringgit (en aquella época US$681 millones) del 1MDB habían acabado en cuentas privadas de Najib.
El departamento estadounidense de Justicia calcula que unos US$4.500 millones fueron desviados de 1MDB, de los que unos US$1.000 millones habrían sido blanqueados en Estados Unidos con la compra de inmuebles, yates, joyas y obras de arte, entre otros bienes.