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Futuro del trabajo: la labor de 28% de latinoamericanos tiene alto riesgo de ser automatizado
Miércoles, Junio 28, 2023 - 15:00
Brazo robótico en fábrica de carros

Según un análisis de Cepal, en el sector industrial, la proporción de ocupados en puestos de trabajo con alto riesgo de automatizarse se eleva al 58%. Las actividades de agricultura, pesca y ganadería tienen la cantidad más baja de trabajadores (8%) en esta situación.

 

El 28% de las personas en la región se encuentra en un puesto de trabajo con alto riesgo de ser automatizado, señaló Alberto Arenas, director de la División de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Los mercados laborales, destacó, se enfrentan a transformaciones importantes y a una alta incertidumbre por los cambios tecnológicos.

Durante la tercera edición del Seminario regional de desarrollo social del organismo, el especialista afirmó que el futuro del trabajo podría profundizar las desigualdades existentes en los mercados laborales, es por ello que abordar los desafíos de la digitalización y la automatización de los empleos requiere de políticas de inclusión.

“Los cambios tecnológicos pueden generar una dinámica de transformaciones, destrucción y destrucción de empleo, tienen dos lados en la moneda. Muchas veces los empleos que se destruyen no son los mismos que se crean, y las personas que sufren esa destrucción no son las mismas que tienen las ventajas de tener un nuevo empleo”, expuso Alberto Arenas.

En el sector industrial, la proporción de ocupados en puestos de trabajo con alto riesgo de automatizarse se eleva al 58%. Las actividades de agricultura, pesca y ganadería tienen la cantidad más baja de trabajadores (8%) en esta situación, según el análisis de la Cepal.

“Los cambios tecnológicos son bienvenidos, pero hay que enfrentarlos con políticas de inclusión laboral para hacer frente a esas transiciones y que ante esos impactos que pueda tener la tecnología, podamos entregar protección social y derechos”, apuntó.

Uno de los principales desafíos de los mercados laborales en la región para avanzar hacia un futuro del trabajo inclusivo, es el cierre de la brecha de habilidades. En Latinoamérica, el 31% de los trabajadores se encuentra subcalificado para la ocupación que desempeña y este desfase de competencias puede acrecentarse con la adopción de tecnología.

“Hay una oportunidad para vincular estrategias educativas y de formación con políticas de inclusión laboral bajo estándares de trabajo decente. Es decir, la coordinación entre las políticas de educación, las demandas del desarrollo productivo y el mercado laboral va a ser más necesaria que nunca al debatir sobre el futuro del trabajo”, aseguró el representante de la Cepal.

Y en el desarrollo de nuevas habilidades, el mercado laboral no sólo demandará competencias técnicas, también se requerirá una fuerza laboral con habilidades socioemocionales como el aprendizaje permanente, la flexibilidad o el liderazgo.

Para atender estos retos, las políticas laborales deben estar vinculadas con el crecimiento económico y el desarrollo productivo y social. La pandemia cambió la composición de las políticas laborales pasivas, las cuales se duplicaron, pero luego de la emergencia sanitaria por la Covid-19, estas retornaron a su nivel histórico.

En este contexto, la inversión en políticas laborales tuvo un repunte en la región, casi triplicando la inversión (0.96% del PIB), pero luego de la pandemia, el gasto público en Latinoamérica en políticas de trabajo retornó a sus cifras previas (0,40% del PIB).

No es momento de cambios graduales y tímidos
Por su parte, José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Cepal, consideró que la región se encuentra en una coyuntura importante y las políticas focalizadas que se implementen hoy definirán el desarrollo regional en el futuro.

“No será posible crear un mejor futuro de trabajo, sin crear un mejor futuro de la producción y viceversa, son dos caras de la misma moneda. Nos encontramos en un punto de inflexión, se requiere actuar con sentido de urgencia y elevar el nivel de ambición en los esfuerzos de políticas públicas. No es momento para cambios graduales y tímidos, sino para políticas transformadoras y audaces que muevan la aguja del desarrollo”, expresó.

Al participar en el evento, Gilbert F. Houngbo, director general de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), afirmó que las desigualdades en el mundo sólo empeorarán al menos que se tomen acciones concretas y coordinadas. Además, para abordar los desafíos actuales de los mercados laborales se necesitan medidas de protección sostenible y anticiparse para mejorar la empleabilidad y productividad de los trabajadores, la mejora de la educación formal y el desarrollo de habilidades.

“El cambio demográfico y la relocalización de las industrias que incluye el cambio climático y el avance tecnológico, para adaptarse a los cambios estructurales en curso, ejercen una inmensa presión sobre la capacidad de los países”, puntualizó.

El Seminario regional de desarrollo social de la Cepal tiene como tema central en esta ocasión la inclusión laboral. Algunos de los enfoques que se debatirán durante el encuentro que reúne autoridades y especialistas son la informalidad laboral, el trabajo infantil, el empleo juvenil, el presente y futuro del trabajo, el desarrollo de habilidades y la articulación entre políticas laborales y de protección social, entre otros.

 

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El Economista