El balneario de la costa ecuatoriana fue golpeado por un potente movimiento telúrico en abril de 2016.
La ciudad ecuatoriana de Manta, con costas al Pacífico, recobró su esplendor turístico, con un incremento del 10% de sus capacidades hoteleras, a solo poco más de un año y medio del terremoto de 7,8 grados que la impactó.
La directora de Turismo del gobierno mantense, Brenda Terán, señaló al diario El Telégrafo que antes del evento telúrico la urbe contaba con 6.000 camas y ahora pasan de 6.600. “En un año hemos crecido después del sismo, eso es positivo. Se evidencia claramente que ha existido inversión por la parte privada y pública, así como también el mismo deseo de salir adelante de los actores del sector turístico”, precisó.
En declaraciones a ese medio, la funcionaria dijo que además se han incrementado el número de establecimientos de alimentos y bebidas, no solo en restaurantes, sino también en cevicherías, fuentes de soda, bares y discotecas.
“Toda esa infraestructura es un punto a favor de Manta. El sismo nos ha ayudado, nosotros hemos renacido en el tema turístico”, apuntó.
Dijo que tras el fenómeno natural, el 16 de abril del año pasado, que dejó al menos 671 muertos, y en el caso de Manta daños importantes a su infraestructura, se ha invertido en infraestructura hotelera más de 120 millones de dólares en construcción, reconstrucción y equipamiento de los sitios de hospedaje, y se destinó financiamiento para nuevos restaurantes y sitios de diversión.
“En 2016, con sismo, recibimos más de 100.000, por eso me atrevo a decir que en esta ocasión el número será mayor (150.000), sumados los eventos que se establecieron por las fiestas de cantonización y del comercio”, apuntó.
Indicó que actualmente se levanta un nuevo complejo hotelero (proyecto Renasso) vía a Barbasquillo; se trata de una edificación de 20 pisos y con vista al mar, y otros proyectos en el suroeste de la ciudad.
“La zona rural también experimenta una suerte de inversión en nuevos alojamientos; hay incluso una propuesta para construir un resort de playa, todo esto suma puntos para el turismo de Manta”.
Por su parte, Doris Martínez, administradora de un negocio comercial en la zona urbana, explicó al rotativo que uno de los puntos en el resurgir de la ciudad provino de la misma ciudadanía, que se dio la mano para levantarse.
La nueva terminal terrestre Luis Valdivieso Morán, que fue inaugurada con una inversión de US$ 21 millones, incentivará la actividad economía de este enclave ecuatoriano.
Clemente Vásquez, contratista de la obra, señaló que la terminal es también un centro comercial, donde llegarán diariamente un promedio de 20.000 personas.
El especialista quiteño Marco Dávila señaló que Manta se sostiene turísticamente de la mano de la nueva infraestructura. A ello se suman eventos como el Ironman, que desde hace tres años se desarrolla en la localidad y también el arribo de cruceros y los encuentros corporativos contribuyen a la actividad.