Luego de cinco años dominados por la escuela de negocios del TEC de Monterrey, la chilena Adolfo Ibáñez recupera el primer puesto en este ranking. Y cada vez más las escuelas de negocios latinoamericanas buscan calidad e innovación por sobre cantidad y tradición.
La última vez que la escuela de negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI) consiguió el primer lugar fue en 2013, cediendo en adelante la cabecera de este ranking a la mexicana Egade, la escuela de negocios del TEC de Monterrey. Hasta hoy.
La principal razón de este avance fue su dominio de la dimensión Poder de Red, en el que la UAI logró una victoria absoluta, llevándose el puntaje máximo en el índice (100). El listado de egresados recientes de la UAI mostró tener ejecutivos en mejores posiciones laborales, con un mayor porcentaje de ejecutivos en altos cargos gerenciales.
Al mismo tiempo, la UAI mejora su competitividad al aumentar la cantidad de profesores PhD con dilatadas trayectorias académicas y doctorados en un selecto grupo de universidades de calidad mundial, con 41 profesores de esta categoría, mientras que la que le sigue solo tiene 34.
“Nos concentramos en mejorar la calidad del faculty sostenidamente. Contratamos profesores locales y un 40% de profesores extranjeros, e invertimos en un profesorado balanceado entre los nueve departamentos que tenemos y en profesionales expertos en la teoría, pero también los que son capaces de hacer clases basados en la práctica”, dice Mauricio Villena, Vicedecano de la Escuela de Negocios de la UAI.
Otro efecto de aquello fue el aumento de su producción y productividad de papers validados por pares, en journals con alto impacto. Entre dos períodos trianuales de publicación, la cantidad de artículos publicados en revistas indexadas tipo ISI de la UAI aumentó de 83 a 108.
Pero aumentar la productividad en investigación no fue una tendencia solo de la UAI. Las top 10 del ranking anual, en general, aumentan en un 43% en esta variable, entre las que se destaca la brasileña EAESP - Fundação Getúlio Vargas, que aumentó en un 144% sus publicaciones –de 47 a 115– y la Universidad de Chile de 152 a 199 artículos.
Otra noticia de esta edición es la reincorporación de Centrum Graduate Business School - PUC de Lima, que vuelve a formar parte del listado tras 7 años de ausencia. Y llega a animar una intensa pero sana competencia con ESAN, con quien tiene una diferencia milimétrica, y Universidad del Pacífico, que sigue solo un poco más atrás. Bien por el Perú.
Nueva generación, nueva empresa
Si una cosa diferencia a los millennials de los baby boomers es la movilidad, que va desde los celulares hasta la movilidad laboral. Según una encuesta realizada por Deloitte en 2017, estos jóvenes entre 20 y 35 años valoran la flexibilidad del trabajo y el reconocimiento por sus habilidades, en vez de su historia laboral. Esta actitud hizo que hasta se creara un nuevo término para referirse a esta generación: los millennipreneurs.
“Cada vez más vemos que nuestros estudiantes quieren ser dueños de sus destinos, y también vemos que hasta las empresas digitales, como Mercado Libre y Wolox, siguen apostando al MBA como método de capacitación de sus ejecutivos”, dice Martín Zemborain, profesor asociado de la Escuela de Dirección y Negocios de IAE.
Ante este fenómeno, AméricaEconomía agregó una nueva variable en esta edición del ranking, que dimensiona las actividades de los estudiantes y alumni de cada escuela en esta actividad. Y los resultados fueron sorprendentes.
De las 38 escuelas de negocios, 30 reportan emprendimientos de sus egresados, que suman 364 en los últimos tres años. Además, de acuerdo a la encuesta realizada por AméricaEconomía a 492 egresados de las universidades participantes en el ranking, éstos puntuaron en promedio un 8,1 (de una escala de 1 al 10) ante la pregunta ‘El programa de MBA me ha dado herramientas para formar un negocio propio’.
“El emprendimiento e innovación, que en algún minuto fue algo extremadamente sofisticado, hoy día es un commodity. Me cuesta creer que alguna facultad de economía y negocios en el mundo no crea que el tema sea un elemento central en los negocios”, dice Matías Lira, el decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo (UDD).
De hecho, esta unidad de la UDD, reportó una cantidad de startups creados por alumni que sobrepasó a todo el resto de las escuelas, con 79 emprendimientos en los últimos tres años.
Otras escuelas del top 10 también tienen proyectos derivados de esta necesidad de emprender. Por ejemplo, Egade Business School lanzó en 2017 su Centro de Innovación y Emprendimiento para ser un lazo conector entre los distintos actores del ecosistema de innovación de México y permitir a los emprendedores presentarse a los inversionistas y corporativos para su startup o scale-up.
Y no se puede dejar de lado el Centro de Innovación UC, en el que las distintas facultades de la Universidad Católica de Chile se juntaron para llevar adelante la transferencia tecnológica, innovación corporativa y la creación de startups. Por un lado, el Centro abre un espacio a estudiantes e investigadores a trabajar en un ambiente colaborativo y multidisciplinario, como también promueve una cultura y provee las herramientas para comercializar la innovación.
Con la colaboración de Fanny Acevedo y Esteban Navarro