Cuando el país sufrió el golpe más profundo de esa crisis el año pasado, unos 8.5 millones de mexicanos acudieron al Nacional Monte de Piedad, la mayor institución de empeños del país. La cifra es 10% mayor a la de 2008.
México DF. Cada vez más mexicanos empeñan sus relojes,joyas y hasta figuras de porcelana para pagar sus deudas, mientras lagente sigue sufriendo en sus bolsillos, a pesar de que la peor recesióneconómica de México en décadas ya quedó atrás.
Cuando el país sufrió el golpe más profundo de esa crisis el añopasado, unos 8.5 millones de mexicanos acudieron al Nacional Monte dePiedad, la mayor institución de empeños del país. La cifra es 10% mayor a la de 2008.
Miles de negocios cerraron sus puertas en 2009, dejando unaestela de despidos. Analistas calculan que entre 200.000 y 400.000personas quedaron sin trabajo en el año.
Aunque México salió de la recesión en el tercer trimestre del añopasado, según datos oficiales, analistas esperan una recuperación lentay frágil, sobre todo en cuestión de empleo.
El mercado laboral es el último eslabón en recuperarse de unacrisis, y suele ocurrir luego de que las industrias y los comerciosponen sus motores de nuevo a máxima velocidad.
"Tuve que venir para poder comprar unas medicinas", dijo María delRefugio Garduño, de 60 años, en su primera visita a la casa de empeños."Ya no alcanza el dinero y cuando pasa algo inesperado como unaenfermedad la cosa se pone peor", agregó.
Ella dejó su reloj y a cambio recibió 400 pesos (poco más de US$30). Su único hijo, soltero y de 33 años, fue despedido endiciembre y los 2.000 pesos mensuales que recibe la mujer por pensiónya no le rinden como antes, en parte también por un aumento este año enlos impuestos al consumo.
La tasa de desempleo en México está rondando máximos de 14 años -6,41% en septiembre de 2008- y miles están buscando opcionestambién en la enorme economía informal.
De acuerdo con datos oficiales, entre enero y septiembre del añopasado más de medio millón de personas se sumaron a la economíainformal, en opciones que van desde puestos de comida callejeros hastavendedores ambulantes o cuidadores de autos.
Todo fue desencadenado por el desplome en la economía. El Gobiernoespera que la actividad se haya contraido 7% el año pasado,por su estrecha dependencia comercial con Estados Unidos.
Este fue el mayor tropiezo para un país de Latinoamérica y el másprofundo para México desde la década de 1930. La recesión azotó confuerza al país en la primera mitad de 2009 y el brote de influenzaA-H1N1 en abril terminó de darle el tiro a la actividad local porqueparalizó a muchas industrias.
Agobio por deudas. El trabajo es escaso y muchos mexicanos se endeudaron con sus tarjetas de crédito, que les está costando pagar.
"Este fenómeno se ha visto más en los últimos meses del año", dijoRoberto Alor, director general de Prendamex, uno de los 5.000establecimientos privados de empeño del país. "Ahora los bancos ponenmás restricciones, además que muchas personas por su condicióneconómica no tienen acceso", agregó.
El porcentaje de incumplimiento de pagos en tarjetas de crédito sedisparó de 2% en 2007, hasta alrededor de 13% en 2009, según el banco central.
Pero los mexicanos no solo empeñan sus pertenencias para pagardeudas, también buscan dinero para los gastos cotidianos de educación,alimentos, salud y vivienda.
Y a pesar de que la economía podría crecer 3% este año,el panorama empeoraría por el rezago que hay entre el crecimiento y larecuperación del mercado laboral y el golpe adicional en los bolsillosde un aumento del 15 al 16% en la tasa del Impuesto al ValorAgregado (IVA).
Como si fuera poco, el gobierno retomó este año su política de alzasen los precios de los combustibles que había suspendido durante elpunto más álgido de la crisis, lo que podría provocar un efectoinflacionario generalizado.
"No lo vas a creer pero vine hace dos semanas para cargar el tanquede la gasolina, se me juntó todo: los reyes (una tradición de regalarjuguetes a los niños el 6 de enero) y el aumento a la gasolina", dijoPedro Uribe, un comerciante ambulante del Centro Histórico.
"Ya vendí algunas cosas en el negocio y pude recuperar una de lasfiguras de cerámica de mi mujer que dejé", agregó, al salir del Montede Piedad portando una figura religiosa.
Pero lo que es un problema para algunos, es un buen negocio paraotros y el Nacional Monte de Piedad elevará para este año el monto depréstamos a 21.000 millones de pesos desde los 19.000 millones de pesosdel año pasado, dijo Gustavo Méndez, portavoz de la institución.
Incluso, la entidad espera abrir 60 nuevas sucursales en todo elpaís este año, para un total de 212, además de ampliar los horarios deservicio.
Méndez asegura que en épocas difíciles la población suele hacer usode su imaginación para buscar entre sus pertenencias algo que le dédinero.
"Una sucursal en la costa recibió una mandíbula de tiburón, suscolmillos estaban unidos por cuerdas y el usuario lo empeñó comoinstrumento" musical, dijo Méndez.
"La lectura es que están creciendo las necesidades de financiamientode la población, desde el que tiene alta capacidad económica hasta elque no la tiene", agregó.