El Museo Tamayo exhibe 65 piezas de la brasileña Jac Leirner, una de las mejores exponentes del arte conceptual en América Latina.
Con 65 piezas se presenta la exposición Funciones de una variable, en el Museo Tamayo Arte Contemporáneo, primera retrospectiva en México de la artista brasileña Jac Leirner, considerada una de las exponentes más sobresalientes del arte conceptual en América Latina, y quien define su propia obra como una gran paradoja que muestra distintas reflexiones en torno a un mismo objeto.
“El arte sirve para pensar con cuidado, para sentir placer, articular y desdoblar lo que ha sido hecho a lo largo de su historia”, dijo Leirner durante un breve recorrido por la muestra que será inaugurada este miércoles y permanecerá abierta al público hasta el 15 de agosto, donde es posible apreciar su predilección por temas como el minimalismo, la seriación, la repetición, la circulación y el consumo.
Leirner (1961) asegura que su obra es subjetiva e intenta resaltar el carácter de la paradoja en su trabajo, dado que cada pieza puede ser vista desde distintas perspectivas, sin dejar de lado el pensamiento poético otorgado a los objetos, y cómo éstos se relacionan entre sí mediante la exploración de la cultura material.
Pese a ser una retrospectiva, Funciones de una variable no muestra una evolución en el trabajo plástico de la artista, ni tampoco crítica alguna sobre la sociedad, sino más bien un desdoblamiento frente a los múltiples significados y la presencia de los objetos en relación con el arte actual, reconoció.
“En mi trabajo no existe el concepto de evolución, sino el desdoblamiento que atraviesa en la historia el arte, debido a que las aproximaciones estéticas de la actualidad no son mucho mejores que las del Renacimiento o el Modernismo”, añadió.
Entre las piezas expuestas se pueden mencionar q Endless (Weel on Weel) (1982), Hardware Seda (2012), Names (1989), To and From (1991), Todos os Cem (Amor) (1998) y All the One Hundreds (with Ghost) (1998). Durante el recorrido, la curadora Julieta González destacó que Jac Leirner es una artista importante en el sentido de que ha mantenido un compromiso con el arte y con su historia. “Pero, sobre todo, la materialidad de su trabajo al servicio de conceptos como la economía, el desuso y los desechos”, alternando piezas de su producción temprana, como son sus poesías concretas, hasta objetos más complejos donde intervienen sobres, tapetes y todo tipo de figuras geométricas.
“Además, en este montaje podremos apreciar la fascinación de la artista por la matemática, tema presente a lo largo de su trabajo artístico, donde utiliza conceptos como la pendiente, el límite, la repetición y la seriación. Ésos son aspectos muy importantes en su acercamiento a los objetos”, precisó.
Una de sus piezas más interesantes en la muestra es Todos os Cem (Amor), una especie de serpiente de papel apostada en el suelo, hecha a base de billetes devaluados. “Y justo el hecho de que ella pueda hacer el trabajo con ese dinero se debe a la economía, donde el dinero devaluado pierde su valor y así ella lo utiliza casi como material de desecho”.
Pero también está Hip Hop, pieza que significa un homenaje al pintor neerlandés Pet Mondrian, considerado el gran colorista de principios del siglo XX.
“En mi opinión, ella toma los conceptos de movimientos anteriores y los despliega de una manera muy conceptual, donde su trabajo tiene esa multiplicidad de lecturas”, explicó Julieta González, explorando el terreno de la cultura material “porque estamos viendo objetos cotidianos y relacionados con nuestra cultura de consumo, sin dejar de lado su afiliación a esos movimientos que crearon quiebres dentro del discurso del arte del siglo XX".
La exposición se titula Funciones de una variable, frase contenida en un poema incluido en la exposición, donde la artista refiere el tema del cálculo infinitesimal, integrando conceptos como derivación, pendiente, límites, errores y aproximaciones.
Leirner es una de las principales artistas de América Latina que surgió a mediados de los 80 y principios de los 90, y formó parte de una generación fundamental para el posicionamiento de los artistas latinoamericanos en exposiciones internacionales.