Los fabricantes de fórmulas lácteas lograron el acuerdo con autoridades de la Secretaría de Salud (Ssa), donde se establece un nuevo marco de competencia para la industria, que incluye políticas y lineamientos en materia de promoción y prácticas de comercialización.
Fabrice Salamanca, director general del Consejo de Ética y Transparencia de la Industria Farmacéutica (Cetifarma), órgano integrante del Consejo de Salubridad General, explicó a El Economista que dicho código tiene la finalidad de hacer públicos los reportes anuales del Cetifarma sobre el resultado de las empresas en el monitoreo que estará implementando, “se hará un monitoreo aleatorio visitando farmacias, verificando que no haya publicidad en punto de venta dirigida a las mamás para fórmulas de cero a 12 meses; se visitarán consultorios para verificar que no haya regalo de muestra médica, y se verificará la publicidad pautada en la televisión”.
Y en caso de incumplir, existirán sanciones que van desde amonestaciones privadas, públicas, multas y suspensiones, algo que anteriormente no se realizaba.
“La firma de este código es un hecho sin precedente en América Latina. Por primera vez, una entidad autónoma como el Cetifarma constatará el cumplimiento de prácticas éticas en la comercialización de sucedáneos de la leche materna”, afirmó Juan Carlos Pardo, presidente de la Canilec.
Pablo Kuri Morales, subsecretario de Promoción y Prevención de la Ssa, destacó que del 2012 al 2015 se logró incrementar en 30% la lactancia materna en el país, situación que no ha mermado a la industria de sucedáneos de leche materna, refirieron la Canilec y Cetifarma.