Lo que pudo haber sido una intensa tragedia -al menos, una lesión- sólo queda en una sorprendente anécdota.
La situación pudo haber sido mucho peor. Definitivamente. Y la fuerza de El Rayo pudo haber quedado en el recuerdo.
Todo ocurre en el Mundial de Atletismo en Beijing. El camarógrafo cumple sus labores de transmisión del evento sobre un moderno vehículo vertical motorizado tipo Segway, similar a los que tienen los efectivos de seguridad en algunos países.
El profesional de la cámara sigue por detrás al destacado atleta jamaiquino Usain Bolt, quien celebra su triunfo en los 200 metros y camina descalzo. Sin embargo, todo se complica cuando una de la ruedas del sistema de movilización del camarógrafo topa con una estructura de la cancha y se va directo -a una velocidad preocupante- hacia las piernas del exitoso deportista.
El Rayo nunca se percató de la situación, hasta que el vehículo lo golpea y lo hace dar una espectacular vuelta en el aire. Increiblemente, el recordman se levanta en forma rápida, por supuesto, algo confundido.
Lo que pudo haber sido una intensa tragedia -al menos, una lesión- sólo queda en una sorprendente anécdota.
