Esto se logró gracias al estado de hipotermia en el que se encontraba y a la acción conjunta del Hospital Vall d'Hebron, Bombers de la Generalitat y el Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM).
Audrey, una mujer inglesa de 34 años, ha sobrevivido a un paro cardiaco de más de seis horas, uno de los más largos registrados en todo el mundo, y el más largo en España, gracias al estado de hipotermia en el que se encontraba y a la acción conjunta del Hospital Vall d'Hebron, Bombers de la Generalitat y el Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM).
Lo han explicado el jefe del Servicio de Medicina Intensiva del hospital, Ricard Ferrer, uno de los miembros del mismo servicio Eduard Argudo y uno de los integrantes del equipo de rescate del Grupo de Actuaciones Especiales (Grae) de los Bombers, Pere Serral, este jueves en rueda de prensa.
El paro cardiaco se dio a causa de una grave hipotermia que sufrió la mujer al ser sorprendida por una fuerte tormenta de nieve durante una excursión que realizó junto a su marido el pasado martes entre el refugio de Coma de Vaca y Núria (Girona).
El estado de hipotermia en el que se encontraba --llegó al hospital con una temperatura de 20 grados-- fue clave para su supervivencia, ya que, como ha explicado Argudo, "en hipotermia, los órganos estaban más preservados, toleraban el hecho de que llegase poca sangre y oxígeno a sus órganos".
El más largo en España
Según ha explicado el doctor Argudo, nunca antes se había documentado "un caso de parada cardiaca reanimada tan prolongada como este en España" --seis horas con el corazón parado--, y pocas veces en todo el mundo.
"La hipotermia estuvo a punto de causar la muerte a Audrey pero a la vez, también la salvó, ya que su organismo, y sobre todo su cerebro, no se deterioró", ha asegurado, insistiendo en que si su temperatura corporal hubiese sido normal, la paciente no habría sobrevivido.
"Su corazón estaba totalmente parado, no tenía ningún tipo de actividad eléctrica o mecánica, en una situación fuera de este caso de hipotermia no habría sobrevivido", ha añadido.
"Cuánto más me informo y leo sobre el tema, más milagroso parece que haya sobrevivido", ha explicado Audrey, que ya está recuperada, sin ningún daño cerebral, y fuera de peligro.
Una actuación conjunta
La supervivencia de Audrey ha sido fruto de un esfuerzo conjunto entre Hospital Vall d'Hebron, Bombers de la Generalitat y el SEM.
En unas condiciones meteorológicas adversas y con una información muy poco precisa sobre su situación, los bomberos lograron atenderla y practicarle las maniobras sanitarias hospitalarias necesarias.
El SEM activó un total de seis unidades, dos de ellas helicópteros, para poder transportar a la paciente hasta el hospital, dónde profesionales de distintas áreas trabajaron conjuntamente para aplicarle la técnica ECMO (oxigenación con membrana extracorpórea), y poder reoxigenar sus tejidos y subir su temperatura.
Ferrer ha asegurado que la cooperación entre los distintos profesionales y entidades "tiene un impacto directo en la supervivencia" y que casos como este son la evidencia empírica de ello.