La compañía explicó esta caída del beneficio a unos menores volúmenes de envíos durante el año en la división de Negocios y a la sólida base comparativa del año 2022.
La acerera brasileña Gerdau recortó su beneficio neto ajustado en un 40,9% en el año 2023 en comparación con el ejercicio fiscal de 2022, hasta los US$ 1.385 millones.
La compañía ha achacado esta caída del beneficio a unos menores volúmenes de envíos durante el año en la división de Negocios y, principalmente, a la sólida base comparativa del año 2022, cuando la compañía registró el segundo beneficio neto ajustado más alto de su historia.
Las ventas también se contrajeron en este período en un 16,4% interanual, hasta los US$ 13.925 millones por la caída de la demanda en los principales mercados en los que opera Gerdau.
Del mismo modo, solo en el cuarto trimestre, la acerera facturó US$ 2.971 millones, lo que equivale a una caída del 18,1% frente al mismo período de 2022. En este caso, el retroceso se debe al impacto negativo de la devaluación del peso en Argentina y a los menores volúmenes de envíos.
Por mercados, Gerdau facturó un 18,6% menos en Brasil. Esta disminución fue causada por una reducción en volumen de envío al mercado interno y un aumento de las exportaciones, lo que trajo una reducción del precio promedio. En la división de Norteamérica, la cifra de negocio cayó un 13,6% interanual y en la de Sudamérica hasta un 28,7%
Los costes llegaron hasta los US$ 446 millones, un 0,9% más que en 2022. En el cuarto trimestre, se elevaron hasta US$ 114,7 millones, un 8,7% menos que en el mismo trimestre del ejercicio precedente.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) cayó un 37,2% en términos interanuales, quedándose en unos US$ 2.728,9 millones. En tanto, el resultado operacional fue un 41,1% menor al de 2022, bajando a los US$ 2.112 millones.
La cifra de inversiones de 2023 llegó hasta los US$ 1.152 millones y la compañía espera elevar esta cantidad hasta los US$ 1.212 millones en 2024.