"Hoy el comercio de granos está paralizado por la escasez de granos, la más dura en 60 años, en segundo lugar por una expectativa ante el triunfo de Milei de que haya una pronta actualización del tipo de cambio oficial", dijo Gustavo Idígoras, presidente del gremio CIARA-CEC.
El comercio de granos en Argentina está "paralizado" por la falta de mercadería debido a una histórica sequía y a que los agricultores no están haciendo transacciones, anticipando una cercana devaluación del peso con el presidente electo Javier Milei, dijo la cámara de exportadores de granos.
Los comentarios son los primeros de este tipo de la cámara de exportadores y procesadores de granos CIARA-CEC, que representa a importantes agroexportadores como Cargill y Bunge. Argentina normalmente es el principal proveedor global de aceite y harina de soja, y el tercero de maíz.
"Hoy el comercio de granos está paralizado por la escasez de granos, la más dura en 60 años, en segundo lugar por una expectativa ante el triunfo de Milei de que haya una pronta actualización del tipo de cambio oficial", dijo Gustavo Idígoras, presidente de CIARA-CEC, en una entrevista.
Argentina, que batalla contra una inflación de tres dígitos y una moneda con escasa confianza pública, aplica severos controles de capital que ha llevado a que el peso en el circuito informal se negocie a más de 1.000 unidades por dólar, muy por encima del tipo de cambio oficial de 350 pesos.
Mientras que el actual gobierno argentino ha extendido beneficios a exportadores que les permite acceder a un tipo de cambio superior al oficial -pero inferior al del mercado informal-, muchos productores están esperando para ver qué hará el economista libertario Milei, el político ultraliberal que asumirá la presidencia de Argentina el 10 de diciembre, y que ha prometido eliminar los controles de cambio y recortar impuestos.
Idígoras dijo que la escasez de porotos para las enormes plantas de procesamiento ubicadas en los márgenes del río Paraná, que transforman los granos de soja en su aceite y harina derivados, significa que muchas están operando con niveles extremadamente bajos.
"Hoy estamos en 73% de capacidad ociosa promedio en las plantas de 'crushing' (molienda) y del 75% de capacidad ociosa en la capacidad portuaria de granos", explicó. "Estamos atravesando el peor año y el peor trimestre de la historia".
Agregó que las plantas estaban reprogramando paradas técnicas debido a la "imposibilidad" de seguir moliendo soja.
"La mayoría de ellas ya están activando esas paradas técnicas en muchas líneas de producción. Van a quedar muy pocas líneas de producción activas en los próximos meses", explicó.
Idígoras pidió al próximo gobierno de Milei que elimine rápidamente restricciones a las exportaciones de granos, incluyendo impuestos, el acceso a divisas y límites a los embarques de algunos granos.
"El gobierno de Milei debe ser el gobierno que tenga la mayor orientación exportadora de la historia, una política agresiva de exportación y para eso primero hay que eliminar todas las restricciones [desde] el día uno", concluyó.
