Para el ministro brasileño de Minas y Energía, Alexandre Silveira, este programa consolidará el liderazgo del país carioca en la transición energética y la economía verde.
El Gobierno brasileño anunció hoy la creación del programa "Combustible para el futuro", que busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y estimular el uso y la producción de biocombustibles en el país, así como una movilidad sostenible con bajas emisiones de carbono.
En una ceremonia en el palacio presidencial de Planalto, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó que Brasil y el mundo no tienen otro camino que el de los combustibles limpios.
"Brasil tiene que decidir, no solo en una ley, sino en nuestro comportamiento y nuestra voluntad, si realmente queremos convertirnos en una nación grande, rica y soberana. Esta producción de biocombustibles, esta transición energética por la que clama el mundo, es una oportunidad sui generis única para este país", dijo Lula.
Para el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, este programa consolidará el liderazgo de Brasil en la transición energética y la economía verde. Según él, el programa implica más de 250.000 millones de reales (US$ 5.000 millones) en inversiones públicas y privadas.
"Vamos a reindustrializar nuestro país. Brasil será el proveedor de soluciones bajas en carbono para otras naciones, porque el camino del desarrollo no se recorre aisladamente. No hay más países desarrollados sin una sociedad próspera. Sí, nos vamos a acordar del pueblo: ese es el propósito de nuestro Gobierno", comentó.
"Vamos a garantizar el desarrollo económico con beneficios sociales, respetando el medio ambiente, vamos a generar más empleos, más renta, una vida mejor para los brasileños, el país va a crecer, descarbonizar sus matrices y contribuir a la descarbonización de los países industrializados", afirmó Silveira.
Según el Gobierno brasileño, el programa "Combustible para el futuro" fue construido con una amplia participación de representantes del Gobierno, de la industria, de asociaciones representativas de los diversos segmentos relacionados con el mercado de combustibles y de la comunidad científica.
El programa aborda diversas cuestiones para promover la descarbonización de la matriz energética del transporte, la industrialización del país y el aumento de la eficiencia energética de los vehículos.
La metodología a ser adoptada es la evaluación del ciclo de vida completo del combustible (del pozo a la rueda) para evaluar las emisiones de las diversas fuentes de energía utilizadas en los modos de transporte, que incluyen las etapas de generación de energía, extracción, producción y uso del combustible. Esta integración pretende mitigar de forma más rentable las emisiones equivalentes de dióxido de carbono.
