De acuerdo con la petrolera, el impacto de este evento sería una reducción de US$ 200 millones en la estimación de su EBITDA para 2024.
Aunque el anuncio del 30 de marzo de que la Refinería Talara de Petroperú sería cerrada durante 90 días para reparaciones es una preocupación de calificación, no afecta el perfil crediticio de la compañía en este momento, según informó Fitch Ratings esta mañana.
De acuerdo con la compañía petrolera estatal, el impacto de este evento de cierre sería una reducción de US$ 200 millones en la estimación de EBITDA para 2024, lo que impulsaría el apalancamiento incluso por encima del 16,0x estimado por Fitch para 2024. Este alto apalancamiento, considerado insostenible por Fitch en su última calificación, se ha incorporado en el perfil crediticio independiente (SCP, por sus siglas en inglés) de la empresa que es 'CCC-'.
En su comunicado, Fitch ha declarado que una nueva rebaja de la calificación de la empresa sería provocada por un empeoramiento de la situación de liquidez no resuelta por parte del gobierno, pero aclaró que no es el caso en este momento. "Si bien este hecho tiene un impacto material en la rentabilidad y deteriora aún más la liquidez, el SCP actual ya refleja un exceso de apalancamiento y una liquidez insuficiente en ausencia de apoyo gubernamental", recalcó la entidad calificadora.
Una nueva rebaja del SCP de Petroperú colocaría a la compañía en la categoría de calificación 'CC', lo que, según la metodología de Fitch, refleja la probabilidad de un probable evento de incumplimiento.
Con todo, esta definición no aplica para Petroperú en este cruce, "dados los incentivos del gobierno peruano para mantener el suministro de combustible al país, evitando así un evento de incumplimiento de la empresa. Estos incentivos se reflejan en la aplicación de los Criterios de Entidades Relacionadas con el Gobierno de Fitch, que vinculan el SCP de Petroperú a la calificación soberana, y resulta en una Calificación de Incumplimiento del Emisor (IDR) a Largo Plazo de ‘B+’ para la empresa", opina Fitch.
La Perspectiva Negativa de la calificación de la compañía refleja no solo la perspectiva del soberano, sino también la incertidumbre con respecto a la cantidad y oportunidad del apoyo gubernamental que Fitch considera necesario para la compañía.
Según las estimaciones de la calificadora crediticia, teniendo en cuenta el apoyo ya recibido a principios de este año, el déficit de efectivo para 2024 superaría los US$ 100 millones.
Fitch continuará monitoreando los siguientes movimiento de la petrolera: reparación oportuna de la unidad FCK; seguimiento de los costos incurridos; la pérdida de ingresos; la puntualidad y significado del apoyo del gobierno; y la posición de liquidez de Petroperú.
"La liquidez de Petroperú sigue siendo escasa. A diciembre de 2023, la empresa reportó US$ 64 millones en efectivo disponible. Sin embargo, enfrenta desafíos para renovar las líneas de crédito renovables por hasta US$ 1.300 millones que aún no están disponibles y están siendo evaluadas por diferentes bancos, debido a preocupaciones ESG", concluye el reporte de Fitch.