Para este 2024, la calificadora de riesgo ha proyectado un Ebitda de US$ 119 millones, frente a pagos de deuda que ascienden a US$ 175 millones.
Fitch Ratings rebajó la calificación crediticia de la petrolera estatal peruana Petroperú de B+ a CCC+, argumentando que enfrenta una grave crisis de liquidez ya que el efectivo que se prevé generará este 2024 no será suficiente para cubrir los pagos de su deuda.
"La empresa se ve obligada a depender en gran medida de fuentes de financiación externas para evitar el incumplimiento. Fitch ha proyectado un Ebitda de US$ 119 millones para 2024 frente a pagos de deuda que ascienden a US$ 175 millones", dice la calificadora de riesgo en un reporte.
Según el análisis de Fitch, Petroperú experimenta una tasa de consumo de efectivo mensual de alrededor de US$ 200 millones durante este período, mientras que la refinería de Talara permanece no operativa.
"Esto conduce a un déficit de efectivo previsto de US$ 280 millones, incluso después de recibir un préstamo de US$ 800 millones desembolsado a principios de año, lo que evidencia una tensión de liquidez que podría dar lugar a un evento similar a un incumplimiento que refleje una calificación de cc", afirma Fitch.
La noticia de la rebaja de calificación crediticia surge horas después de que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de Perú remitiera un hecho de importancia a Fitch Ratings garantizando que que el Gobierno de Dina Boluarte continuará apoyando económica y financieramente a la compañía petrolera con el fin de de promover su sostenibilidad. En tanto, el ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, expresó que será necesario continuar con el soporte a Petroperú ante la rebaja de calificación crediticia.
En ese sentido, Fitch no anticipa un apoyo sustancial del gobierno nacional para la estructura de capital de Petroperú en el corto plazo. Para la calificadora, pese a que el gobierno proporcionó liquidez en 2022 para satisfacer las necesidades inmediatas, estas medidas no abordaron el problema fundamental del elevado endeudamiento.
Además, apunta que los desafíos operativos relacionados con el cronograma de finalización de la Refinería de Talara y las demandas de efectivo de su puesta en marcha han llevado a mayores necesidades financieras que la compañía deberá satisfacer de fuentes externas en 2024.
"Petroperú ha solicitado US$ 2.500 millones al gobierno y ha recibido una respuesta tibia: un préstamo de US$ 800 millones del Banco de la Nación y un aumento de las garantías existentes de US$ 500 millones a US$ 1.000 millones. Estas medidas abordan problemas de liquidez inmediatos, pero no resuelven las deficiencias estructurales del balance", concluye el reporte de Fitch.