La sobreproducción y, por ende, los altos inventarios de leche han sido una de las causas del mal momento de los productores.
El sector lácteo colombiano lleva más de un año pasándolo mal. Algunos ingredientes de esta crisis extendida han sido los altos inventarios de producto.
En julio de 2024, los inventarios alcanzaron 188,4 millones de litros, un aumento considerable frente a los 125,2 millones de 2023, de acuerdo con la Unidad de Seguimiento de Precios de la Leche (USP) del Ministerio de Agricultura.
En la misma línea, se ha presentado una sobreproducción de leche. Frente a esto último, el sector contaba con una reducción que compensaría la amplia oferta que había, pero no fue así.
Entre tanto, el consumo de leche y derivados ha disminuido significativamente en los últimos años, con caídas de 9% en 2022 y 6% en 2023. Aunque hay una leve recuperación del 0,9% en 2024, no es suficiente para revertir la crisis, de acuerdo con las cuentas de Asoleche.
Desde el Ministerio de Agricultura afirman que se vienen implementando algunas medidas para atenuar la situación del sector lácteo, como la creación de mecanismos que faciliten la comercialización de leche en polvo, líquida y derivados, así como el fomento a las exportaciones, con el fin de reducir los inventarios.
EL PROBLEMA CON LOS PRECIOS
Los precios de la leche para los consumidores se han mantenido estables, con un aumento de solo 0,44% entre agosto de 2023 y 2024, según cifras del DANE. Mientras que los quesos y otros derivados han tenido un incremento de 3,8% y 2,73%, respectivamente.
La cartera informó este miércoles que, a través del Fondo de Estabilización de Precios de Carne y Leche, se han comercializado 988 toneladas de leche en polvo, 900.704 litros de leche UHT y 4.500 kilos de queso entre frescos y maduros, en negociaciones que han contado con el apoyo de la Bolsa Mercantil de Colombia.
Así mismo, el Ministerio ha liderado Mesas Técnicas de Compras Públicas generando acercamientos con entidades nacionales para promover el consumo de leche y, con ello, contribuir al aumento en los volúmenes de acopio y así evitar represamientos en las fincas productoras.
MAYORES COMPRAS A PRODUCTORES
En la misma línea, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) se comprometió a aumentar la producción de bienestarina líquida y en polvo, lo que representa compras adicionales de leche a productores colombianos.
Y es que otro de los problemas del sector ha sido la caída en los precios al productor: Fedegán sostiene que, entre abril de 2023 y agosto de 2024, el precio que se paga a los ganaderos por litro de leche ha caído 16%.
Algo que disminuye directamente la rentabilidad de los productores cuyo sustento es esta actividad económica. Y dicha caída, sostiene el gremio ganadero, no se ha visto reflejada en el precio final para los consumidores, lo que podría desincentivar el consumo.
El Minagricultura asegura que se adjudicaron recursos por $30.000 millones (US$ 7,2 millones) del Fondo de Solidaridad Agropecuario para aliviar la cartera vencida de 14.311 productores lácteos.
Para lo que resta de año, el Gobierno tiene previsto promover la estabilidad de la cadena con la puesta en marcha de un incentivo al almacenamiento de leche UHT, en polvo y quesos madurados, para mantener así la compra continua de leche cruda al productor nacional.
LOS RIESGOS DE LAS IMPORTACIONES
En 2023, un 62,22% de la leche en polvo importada en Colombia provino de Estados Unidos y las compras de estos productos han aumentado significativamente después del TLC, pues crecieron en 863% entre 2012 y 2023. Estas importaciones, con presuntas subvenciones, han afectado a los productores locales porque generan la disminución del uso de la capacidad instalada en la industria pulverizadora local y reduce las compras nacionales.
Al respecto, el Ministerio de Agricultura afirma que se articuló un trabajo con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo para la expedición de una salvaguarda que impone derechos compensatorios provisionales a la importación de leche en polvo proveniente de Estados Unidos.