Heineken Spin tendrá cuatro pilares fundamentales enfocados en energías renovables, agricultura regenerativa, reciclaje de envases y alianzas con marcas de impacto en ESG.
Heineken anunció este miércoles la creación de una nueva unidad de negocios en Brasil para rentabilizar las acciones de sustentabilidad, en una estrategia que cuenta con socios e inversiones iniciales combinadas de aproximadamente 150 millones de reales (unos US$ 27,6 millones).
Heineken Spin tendrá cuatro pilares fundamentales enfocados en energías renovables, agricultura regenerativa, reciclaje de envases y alianzas con marcas de impacto en ESG (acrónimo en inglés de Environmental, Social and Governance, que representa el equilibrio de estos temas en la gestión empresarial).
"Si queremos apoyar un crecimiento sostenible, tenemos que hacer un negocio que genere resultados financieros", dijo el presidente ejecutivo de la segunda cervecería del país, Mauricio Giamelaro, destacando que la nueva división "es un ecosistema que irá más allá de la producción de cerveza".
Añadió que la sostenibilidad siempre ha estado en la agenda de la empresa, y que ahora Heineken Spin es una forma de "seguir haciendo girar la rueda (del negocio), pero de una manera diferente", incluyendo el trabajo colaborativo con otras empresas.
"Heineken en Brasil es consciente de que es muy buena construyendo marcas, respetando al consumidor y a sus socios y produciendo cerveza de calidad. Pero hay otras cosas que debemos hacer de manera competente... En lugar de verticalizar, trajimos personas a este ecosistema" , él afirmó.
Añadió que Spin “nació para ofrecer resultados”. "Todas las empresas tienen el objetivo, este año, de obtener un 'payback' positivo", reforzó, añadiendo que la expectativa para Spin es un crecimiento de dos dígitos por año en ingresos.
Para cada uno de los cuatro pilares que sustentan Spin, hay uno o más socios y empresas que ya están involucrados o que están por llegar.
Uno de estos frentes, el de las energías renovables, tiene un acuerdo desde 2021 con Ultragaz, del Grupo Ultra, y Raízen, que busca apalancar el uso de fuentes de energía limpia entre consumidores y establecimientos.
Energía Verde tiene actualmente cuarenta mil contratos activos y, según el vicepresidente de Sostenibilidad de Heineken en Brasil, Mauro Homem, deberá crecer a medida que el programa logre posibilitar la disponibilidad de generación distribuida.
El ejecutivo destacó que este es el único proyecto de Heineken Spin que la empresa ya desarrolla, mientras que los otros tres frentes en los que se enfocará la cervecera son nuevos.
Uno de ellos se refiere a la agricultura regenerativa, con la plantación de limones orgánicos en un área de más de 800 hectáreas de la empresa cercana a la cervecería del grupo en Itu (SP). Es algo que "protegerá un área que es súper importante para nosotros desde el punto de vista de la resiliencia hídrica, pero también podrá secuestrar carbono".
"Vemos que podría ser un modelo hermoso y que también puede ser escalable a otros lugares, demostrando que se puede preservar, se puede generar carbono y al mismo tiempo se puede obtener un retorno de los ingresos", añadió.
Los frutos se venderán y las ganancias obtenidas se reinvertirán en expandir el modelo de negocio a otras regiones del país.
Esta iniciativa se desarrolla en alianza con la empresa desarrolladora de sistemas agroforestales y productora de granos orgánicos regenerativos Rizoma, cuyo socio fundador es Pedro Paulo Diniz.
RECICLAJE
Un tercer pilar es la circularidad de materiales y embalajes para reducir las emisiones de carbono ampliando el reciclaje de vidrio. Y en ese frente, la empresa tendrá una alianza con Ambipar, que trabaja con la gestión ambiental.
Según el vicepresidente de Sostenibilidad de Heineken en Brasil, la empresa está estructurando un sistema para cubrir áreas donde actualmente no hay recolección de vidrio.
Dijo que el grupo iniciará esta acción en tres estados, uno de ellos en la región Sudeste y otro en el Nordeste, mientras que la ubicación del tercero aún no ha sido "soltada". La perspectiva del grupo es que estas tres operaciones estén operativas a finales de año.
“Vamos a tomar las zonas donde no hay cobertura y poner recursos para que ese vidrio regrese a la cadena de valor y podamos remunerar a toda la cadena, partiendo por el recolector, el acopiador, quien lo transporta y hasta quién transforma este vidrio", afirmó el ejecutivo.
En declaraciones al mercado también este miércoles, Ambipar dijo que, al cerrar la operación, pasará a formar parte de las ofertas estratégicas para atender otras demandas de servicios ambientales de la cervecería en Brasil.
El cuarto eje de la estrategia de Heineken es trabajar con las llamadas marcas de impacto, en las que el grupo busca propósitos en nuevas marcas para enfrentar desafíos que involucran innovación, especialmente en las relaciones con los consumidores.
Para ello, Heineken se asoció con Better Drinks, propietaria de las marcas Mamba Waters y Cerveja Praya, que afirma haber adoptado los ESG como pilar fundamental desde su fundación.
"Son capaces de acercar esta conexión con nuestros consumidores y al mismo tiempo pueden aportar una perspectiva de innovación que actualmente no tiene escala, con productos que van más allá de nuestro portafolio tradicional", dijo Homem. "No podemos innovar al mismo ritmo sin un modelo diseñado para ello".
Otra asociación involucra a la Central Única das Favelas (Cufa). "Entendemos que necesitamos estar más cerca de las comunidades para que estas innovaciones también sean más efectivas", afirmó el ejecutivo.
Explicó que la Cufa realiza una labor curatorial de búsqueda de emprendedores en las favelas para que la empresa aporte algo al pipeline de innovación que a veces no se ve porque no es tan cercano a este público consumidor.
Según el director general de Heineken en Brasil, el desarrollo de la nueva unidad de negocios está alineado a nivel global, especialmente la parte de reforestación, debido a la administración de créditos de carbono, pero inicialmente es una plataforma sólo en Brasil.
Destacó, sin embargo, que si el país logra hacer todo lo previsto, podrá entregar buena parte del resultado global de la empresa con sede en Holanda, dada la relevancia de la operación brasileña de la marca. A nivel mundial, Heineken tiene el objetivo de neutralizar las emisiones de carbono en toda su cadena de valor para 2040.