La petrolera española afirma que se encuentra revisando los alcances del reclamo, pero rechaza que tenga fundamento alguno.
Mediante un comunicado oficial, la petrolera española Repsol rechazó la demanda presentada por el bufete de abogados británico Pogust Goodhead a los tribunales de Países Bajos. Esta mañana se dio a conocer que Pogust denunció judicialmente a Repsol por un importe equivalente a US$ 1.200 millones en relación al derrame de petróleo ocurrido en Perú en enero de 2022. Este suceso es considerado uno de los peores desastres ambientales en la historia reciente de América Latina.
El objetivo de la demanda busca indemnizar a más de 30.000 ciudadanos peruanos afectados por el derrame de crudo. Por su parte, la justificación del bufete británico consiste en señalar que a pesar de las investigaciones de las autoridades peruanas, diversas personas y empresas afectadas por el derrame no han sido compensadas. Por ende, sus trabajos y actividades cotidianas no pueden seguir con naturalidad. De esta manera, Pogust dirigió la demanda a la refinería La Pampilla, propiedad de Repsol y epicentro del accidente ubicado al norte de Lima.
LA NEGATIVA TAJANTE DE REPSOL
En respuesta, la petrolera española ha declarado que actualmente se encuentran revisando los alcances del reclamo de Pogust. Sin embargo, en el mismo comunicado, rechazan que la demanda judicial tenga fundamento alguno y que el caso debería ser abordado exclusivamente por la justicia peruana.
Asimismo, como en su última declaración ante el Congreso del país andino, Repsol destacó que ha destinado más de 1.000 millones de soles (US$ 266,3 millones) para las tareas de limpieza, remediación y compensaciones. Además, según su versión, el agua marina y las playas afectadas cumple con los "más altos estándares de calidad ambiental, tanto nacionales como internacionales". Por ello, serían aptas para el retorno de las actividades turísticas y pesqueras en la zona.
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