Entre enero y setiembre de este año, las agroexportaciones han sumado US$ 6.600 millones, una caída de 5,8% con relación a lo facturado en el mismo período de 2022 (US$ 7.000 millones).
El año 2023 ha sido sui generis para la economía peruana. Afectada por factores externos, políticos y climáticos, la producción peruana ha tratado de superar diversos obstáculos, especialmente en aquellos sectores que se han convertido en un pilar fundamental de su desarrollo, como es el caso de las agroexportaciones.
Y es que elementos externos y de carácter climático vienen impactando en el sector y, sin embargo, este sigue adelante.
El especialista de la Dirección de Estudios Económicos de la Dirección General de Políticas Agrarias del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), César Romero, comentó que, entre los fenómenos climáticos más importantes ocurridos este año figura el Fenómeno La Niña global, que impactó en el sur del país con ausencia de lluvias, una situación muy grave que nunca antes se había vivido en el país.
No obstante, este fenómeno climático no tuvo un impacto mayor en la zona norte del país. “Ciertamente, no hubo agua por la falta de lluvias, pero quienes tenían reservorios o trabajaban con pozos pudieron seguir adelante, de tal manera que 2022 fue el año más importante para las agroexportaciones con ingresos por US$ 10.400 millones”, destacó Romero en el Suplemento Económika del Diario El Peruano.
Luego vino el Fenómeno El Niño Costero, con el calentamiento del mar que afectó afecta la zona norte de Perú y Ecuador.
“Este factor impactó fuertemente en la agricultura nacional y con énfasis en el sector agroexportador. A ello se suma el ciclón Yaku, que elevó las temperaturas en cuatro grados por encima de lo normal, lo que condicionó, inclusive, las intensas lluvias desde Tumbes hasta Ica, con un efecto devastador para el sector”, refirió.
Resiliencia sectorial
De acuerdo con Romero, las agroexportaciones registraron un espectacular crecimiento desde 2000 hasta 2022, con baches excepcionales por problemas de carácter mundial.
“Pese a ello, siempre han seguido adelante, tanto las tradicionales como las no tradicionales. En el caso de las segundas, el crecimiento ha sido de 13% anual entre 2020 y 2022 y de un 11,6% entre 2010 y 2022”, aseveró.
Entre enero y setiembre de este año, dijo, las agroexportaciones han sumado US$ 6.600 millones, una caída de 5,8% con relación a lo facturado en el mismo período de 2022 (US$ 7.000 millones). “Un impacto muy fuerte que es consecuencia de factores externos y medioambientales”, dijo.
Hay 30 productos que representan más de 76,6% del total de las exportaciones peruanas. 15 de estos productos mantienen un comportamiento positivo, es decir, sus envíos se incrementaron de manera significativa y otros 15 productos muestran una relativa caída
Cabe precisar que los productos que registraron caídas en sus envíos representan el 32% del total exportado; mientras que los que incrementaron sus exportaciones representan el 44%.
Entre los productos que lograron comportamientos positivos en sus envíos destacan la palta, las uvas, los espárragos frescos y el mango.
No obstante, uno de los productos que muestra un decrecimiento en sus exportaciones es el arándano, que mostró importantes resultados en los últimos meses, pero que en septiembre último registró una caída significativa.
Lo mismo ocurrió en el caso del café, cuya caída es del 49,1%. “En este caso, además de los problemas climáticos, el café afronta un problema muy serio a causa de la roya. Además, las plantas de café son muy antiguas, lo que afecta la calidad y rendimiento de los productos”, refirió Romero.
Por productos
Al analizar el tema por producto, el representante del Midagri sostuvo que, en el caso del arándano, las exportaciones, en términos de volumen, pasaron de 137.000 toneladas en el período enero-setiembre de 2022 a 91.000 toneladas en el mismo período de este año, es decir, una reducción de 33,6%; mientras que, en términos de valor, la caída es menor, pues pasó de US$ 735 millones registrados en 2022 a US$ 707 millones este año.
“No obstante, Perú, al ser un país fijador de precios en el caso de los arándanos, considerando que es el primer productor mundial de este producto, el incremento de los precios compensó la caída de la oferta. “Esto permitió, de alguna manera, tener un equilibrio en los niveles de ingresos”.
En el caso de la palta, pese a todos los problemas que enfrentó, pudo superarse y pasó de US$ 885 millones en exportaciones registrados en 2022 a US$ 963 millones a septiembre de este año, lo que significó un crecimiento de 8,8%.
“Los esfuerzos apuntan a superar los niveles registrados en 2021, que fue el año récord para este producto. En términos de volumen, los envíos de palta pasaron de 578.000 toneladas en 2022 a 595.000 toneladas este año, es decir, un incremento de 2,9%”, aseveró Romero.
La uva también registró un crecimiento muy importante. Según el especialista del Midagri, se puede ver que, en términos de valores, los envíos pasaron de US$ 592 millones en 2022 a US$ 694 millones en 2023, lo que significa un incremento de 17,1%; mientras que, en términos de volumen, pasó de 251.900 toneladas a 294.400 toneladas, lo que significó un crecimiento de 16,9%.
“El caso del mango también es importante. En términos de valor, los envíos de este producto aumentaron en 0,4%, pasando de US$ 206 millones en 2022 a US$ 207 millones este año; mientras que, en términos de volúmenes, el crecimiento registrado es de 6,4%.
Los envíos de espárragos también mostraron un comportamiento positivo entre enero y setiembre de este año, pasando, en términos de valores, de US$ 241 millones en 2022 a US$ 250 millones en 2023 (3,8%); sin embargo, en términos de volumen, se produjo una disminución de 20,4%, pasando de 81.000 toneladas a 65.000 toneladas.
“Esto indica que el precio ha sido el que ha sostenido el desempeño del espárrago, el cual todavía sufre los impactos del Fenómeno El Niño Costero”, refirió Romero.
Mercados de destino
Las agroexportaciones peruanas se destinan a 20 economías, las cuales representan el 95% del total exportado. “No obstante, la mayor concentración se encuentra en Estados Unidos y la Unión Europea, pues ambos mercados comprenden alrededor del 58%”, refirió Romero.
El especialista destacó que Perú ha suscrito tratados de libre comercio (TLC) con 18 de estos países.
“Además, tenemos un tratado en ciernes con Hong Kong, el cual está en pleno proceso de negociación y solamente con Rusia no tenemos un TLC, porque se trata de un mercado pequeño para nuestros intereses en este sector”, aseveró.
Al referirse a la Unión Europea, Romero aseveró que este bloque se encuentra en un proceso de recesión desde hace mucho tiempo, lo que contrajo la demanda de los productos peruanos. “La Unión Europea es un mercado muy importante para nosotros, pese a la coyuntura por la que atraviesa. Países Bajos, seguido por España, son los que mantienen significativos niveles de importación de nuestros productos, por lo que son muy importantes para Perú”, puntualizó.
Costos y pérdidas
El especialista de la Dirección de Estudios Económicos de la Dirección General de Políticas Agrarias del Midagri comentó que el año pasado se registraron serios problemas relacionados con el alza del precio del petróleo, de los fletes y de los fertilizantes, los cuales impactaron significativamente en el desarrollo del sector agrario.
Romero precisó que este año, la guerra entre Rusia y Ucrania y el conflicto social en el país significaron un costo de aproximadamente 4,000 millones de soles, según datos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
“Asimismo, el ciclón Yaku y el Fenómeno El Niño Costero significaron alrededor de US$ 1.112 millones en pérdidas, lo que sumado al déficit hídrico en el sur del país, por US$ 185 millones, y a la paralización de la pesca de anchoveta, por el calentamiento del mar, significó otros US$ 794 millones en pérdidas”, precisó,
Según dijo, todos estos problemas representaron pérdidas totales entre los US$ 2.912 millones y US$ 3.177 millones, lo que afectó el desempeño de la economía del país.