El monto de la transacción ascendió a US$ 64 millones, según informó la compañía a la Superintendencia Financiera de Colombia.
La empresa colombiana Terpel anunció la venta de sus estaciones de servicio y tiendas de conveniencia en Perú y Ecuador a Primax, la empresa comercializadora de combustibles del Grupo Romero.
A través de un comunicado remitido a la Superintendencia Financiera de Colombia, Terpel informó que su junta directiva había aprobado la enajenación de sus activos y filiales en Perú y Ecuador a Primax por un valor de US$ 64 millones.
Según Terpel, esta decisión obedece a una revisión estratégica y su interés de concentrarse en fortalecer negocios con mayor capacidad. crecimiento y rentabilidad en países donde existen posibilidades de escala.
Asimismo, Terpel anunció que busca centrarse en nuevas oportunidades derivadas de los desafíos asociados a la transición energética y la reconfiguración de la matriz energética. "Terpel busca enfocarse en nuevas oportunidades que se derivan de los desafíos asociados a la transición energética y la reconfiguración de matriz energética", dijo en un comunicado de prensa.
En tanto, el contrato de venta -que suscribió con Corporación Primax S.A. y Coesti S.A.- está sujeto a la aprobación de las autoridades competentes de cada país y mientras se ejecuta la transacción, el control y la operación del negocio siguen estando a cargo de Terpel.
Además, Terpel seguirá fabricando y comercializando lubricantes Mobil en Perú y continuará con la comercialización de combustibles de aviación, la venta mayorista de combustibles líquidos y el despacho y operación de Gas Natural Vehicular (GNV) destinado al transporte masivo en la ciudad capital.
Por su lado, con esta adquisición Primax fortalece su presencia tanto en Perú como en Ecuador.
“Con esta transacción, la marca Primax fortalece y expande su oferta de valor diferenciada a más puntos estratégicos del mercado energético ecuatoriano”, dijo Primax al medio especializado peruano Semana Económica.
En 2008, Primax adquirió a Repsol las estaciones de servicios de Recesa y Oiltrader por un valor de US$ 47 millones.