Consolidación de los casos es el primer gran paso en EE.UU. para enfrentar múltiples reclamos por lesiones personales y demandas colectivas de consumidores, debido a la aceleración no intencionada en los vehículos.
San Diego. Abogadosque demandan a Toyota en todo Estados Unidos debido a vehículos queaceleran fuera de control presionaron a un panel judicial especial estejueves para unir decenas de casos y asignarlos a una o dos cortes, paraprocedimientos previos al juicio.
La consolidación de los casoses el primer gran paso en el sistema legal de Estados Unidos paraenfrentar múltiples reclamos por lesiones personales, demandascolectivas por fraude a consumidores y otros casos civiles en cortesfederales, debido a la aceleración no intencionada en los vehículos deToyota.
Toyota Motor Corp efrenta unapotencial responsabilidad estimada por algunos abogados en más de10.000 millones de dólares, mientras lucha por contener una crisis deseguridad en sus vehículos que ha manchado su alguna vez impecableimagen pública y golpeado sus ventas.
Las quejas de vehículos que sesalen de control y otros temas de seguridad han llevado al retiro demás de 8,5 millones de coches Toyota en todo el mundo, la mayoría parareparar alfombrillas mal diseñadas y pedales de aceleración que seatoran, a los que la automotriz culpa de los problemas.
Muchas de las demandas sugierenque el problema se deben a una aún no identificada falla electrónica,lo que ha sido rechazado con fuerza por la automotriz japonesa.
Sólo la aceleración nointencionada ha estado relacionada a más de 50 muertes en choques ydecenas de heridos en vehículos Toyota y su línea de lujo Lexus durantela última década, los que están siendo investigados.
La audiencia del jueves en SanDiego también presentó una primera oportunidad a los principalesabogados del país para que brevemente ocupen el centro de atención enuna sala llena de sus pares, mientras competían por el papel principalen las batallas que se avecinan.
Media hora antes del inicio delprocedimiento en la mañana, los abogados aún estaban envueltos ennegociaciones en una esquina de la sala para decidir quien y cuantos deellos recibirían dos minutos para hablar ante el panel de cinco jueces.
"Estos segundos, estos minutos,son como cigarrillos en prisión", bromeó Mark Lanier, un abogado deHouston que fue escogido para hablar. "Los abogados de California estáluchando unos con otros por los dos minutos", agregó.
No se espera una decisión poral menos dos semanas. Pero el abogado de Toyota y la mayoría de los 23juristas que presentaron sus argumentos instaron a enviar los casos ala Corte de Distrito de Los Angeles, el recinto más cercano a la sedede la división de Toyota en Estados Unidos.