Se aseguró que no solo hay pocos aviones activos, sino que también la autoridad aeronáutica está atrasada en la aprobación de algunas licencias.

De 120 aviones que agrupa la flota aérea venezolana, 58 están inactivos, lo que implica que 48% se mantiene inoperativa hasta nuevo aviso, o hasta que Cencoex apruebe divisas para la compra de repuestos y nuevas unidades.

Humberto Figuera, presidente de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela mostró un estudio realizado por la organización a cada una de las aerolíneas nacionales, en donde se evidencia que la flota nacional está en uno de sus peores momentos.

“Aproximadamente 48% de la flota de las aerolíneas nacionales está en quiebra porque le falta repuestos y porque le falta dinero para poder hacer el mantenimiento, en ciertos casos porque no tienen seguro, ya que Cencoex no ha aprobado las divisas para que le puedan pagar a la compañía aseguradora”, explicó.

No solo hay pocos aviones activos, sino que también la autoridad aeronáutica (Inac) está atrasada en la aprobación de algunas licencias; además, los seguros de las aeronaves están por vencerse y la edad promedio de los aviones ronda los 30 años.

“Tenemos una aviación débil, que no permite competir con sus pares extranjeros, y mientras esa competencia no se dé, vamos a estar sometidos a lo que establezca el mercado”, dijo.

“La edad promedio de la flota es terrible, y pese a ello, el problema más grande es que se liquiden divisas a las líneas aéreas, porque los proveedores de afuera ya no confían en el Gobierno venezolano, por lo tanto no dan crédito”, dice el presidente de Alav.

El aporte al fisco

El presidente de Alav indicó que el año pasado las líneas aéreas (nacionales e internacionales) pagaron un total de Bs. 7.649 millones al Estado venezolano en impuestos, lo que implicó US$1.214 millones al cambio de Bs. 6,30 bolívares. “Pese a las condiciones actuales de las aerolíneas, su contribución es muy importante para el fisco nacional”, resaltó.

A juicio de Figuera, una de las razones por las que el sector no logra ser tan competitivo como en otros países es precisamente por la cantidad de tributos que deben cancelar las empresas aéreas al Gobierno: en IVA el pago es 12% de sus ingresos; al Instituto Nacional de Turismo, 1%; a la autoridad aeronáutica, 1%; a la Oficina Nacional Antidrogas, 0,5%; al Ministerio de Ciencia y Tecnología, 0,5%; al Ministerio de Deporte, 0,5%; más los impuestos de salida y las tasas aeroportuarias.

“El gobierno no se ha dado cuenta de que el esfuerzo que hacen las líneas aéreas en impuesto no se reemplaza tan fácilmente”, comentó Figuera.