El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, aclaró que esto excluye a Petróleos Mexicanos.
ElEconomista.com.mx. Ante la petición del sector empresarial mexicano de que sean las compañías nacionales, en especial las pequeñas y medianas, las primeras en la lista para participar en la apertura energética, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, dijo que resulta “imposible” jurídicamente privilegiar a las mexicanas, a excepción de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Tras reunirse en privado, el funcionario aseguró al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) que aún existe tiempo para que las leyes secundarias en materia energética sean aprobadas por el Congreso antes de que termine abril.
A decir de Juan Pablo Castañón, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Coldwell ofreció al CCE analizar alguna forma para que la integración nacional se pueda dar en las leyes secundarias de la reforma energética.
“Es evidente que la experiencia y la tecnología de empresas pequeñas y medianas no se puede tener en proyectos de aguas profundas, pero en gas shale sí, las vocaciones naturales son para hacer alianzas estratégicas en empresas mexicanas medianas y empresas extranjeras”, explicó el empresario, al cabo de la reunión.
Al cuestionarle sobre la Ronda Cero de Petróleos Mexicanos, el presidente de la Coparmex comentó que junto con Coldwell se analizaron los avances —y aunque ya existe una posición, será en los próximos días cuando se de a conocer.
“(Es) bueno el fortalecimiento de Pemex para intervenir en la Ronda Cero y el comparativo de la experiencia de otros países. Parece que estamos en el estándar de apertura de las experiencias internacionales”, consideró Juan Pablo Castañón.
Mencionó que se pactó con el titular de Energía mantener mesas de trabajo con el CCE, a fin de que ellos reciban la retroalimentación de cómo van y cuál es el interés de poder generar la infraestructura mexicana, sobre cómo será la demanda de la inversión en materia energética y tener las leyes secundarias antes de que termine el periodo ordinario del Congreso.
La postura del sector empresarial fue avanzar en la concreción de las leyes secundarias y dar señales de certidumbre a la inversión. No sin dejar plasmada la importancia de la participación de las pequeñas y medianas empresas mexicanas en el rubro energético.
Pemex inicia construcción del gasoducto Los Ramones. Tras la polémica por un proceso de licitación en que Petróleos Mexicanos (Pemex), a través de filiales y de la subsidiaria Gas y Petroquímica Básica (PGPB), se quedó con 63% de la operación, arrancó el miércoles la construcción del gasoducto Los Ramones, el proyecto más grande de este tipo en el país durante las últimas cuatro décadas.
En la estación de comprensión Los Ramones, ubicada en la carretera Reynosa–Monterrey, los directores de Pemex, Emilio Lozoya Austin, y de PGPB, Alejandro Martínez Sibaja, dieron inicio a este mega proyecto que, incluyendo un tramo más desde Texas, tendrá una inversión de casi US$2.500 millones por parte de Pemex.
Con el sistema fronterizo Agua Dulce-Frontera y Los Ramones se abastecerá 20% de la demanda de gas natural del país, la cual se estima que crecerá 2,9% anual en los próximos 15 años, según explicaron.
El proyecto comprende la construcción de un sistema de transporte por ducto que incrementará la capacidad de transporte de gas natural en 2.100 millones de pies cúbicos por día, con una longitud de más de 846 kilómetros, que irá desde la frontera con Estados Unidos, en Camargo, Tamaulipas, hasta Guanajuato. Su entrada en operación está prevista para diciembre de 2015.
La fase I de este proyecto unirá Camargo, en la frontera de Tamaulipas con Estados Unidos, con Los Ramones, Nuevo León; la fase II fue dividida en dos tramos: el Norte, abarca 441 kilómetros de Los Ramones a Villa Hidalgo, San Luis Potosí, con dos estaciones de compresión; mientras que Los Ramones Sur comprende 287 kilómetros de longitud, de San Luis Potosí a Guanajuato, con una estación compresora.
Las participaciones. Al concluir el proceso de licitación de este proyecto en octubre pasado, diversos empresarios agrupados principalmente en el Consejo Coordinador Empresarial, manifestaron preocupación ante el hecho de que gracias a las altas demandas del concurso hubo poca participación de privados y Pemex terminó adjudicándose la mayor parte del proyecto en consorcios de su subsidiaria PGPB o de sus filiales.
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