El director ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Achim Steiner está convencido que en 20 años las fuentes renovables energéticas ganarán el mercado, sencillamente por la situación económica.
Los Cabos, Baja California. ElEconomista.com.mx. La explotación de gas Shale debe ser tomada como una medida a corto plazo para transitar hacia inversiones en energías limpia y hacia una economía verde, pues de lo contrario en el futuro se generarían pasivos ambientales, opinó el director ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), Achim Steiner.
En conferencia de prensa, en el marco de la XIX Reunión del Foro de ministros de Medio Ambiente de América Latina y el Caribe, en San José, Los Cabos explicó que los países empleadores de combustibles fósiles no están en una etapa que los posibilite a deshacerse de ellos.
Primero, necesitan establecer una política de transición para generar espacios a una economía basada en energías renovables. El funcionario del Pnuma está convencido que en 20 años las fuentes renovables energéticas ganarán el mercado, sencillamente por la situación económica.
"La manera en que están cayendo los precios para ciertas tecnologías, la eficiencia de tecnologías inteligentes (...) los inversores van a tener mucho cuidado en invertir en combustibles fósiles...La energía renovable es una inversión menos arriesgada en cuanto a los asertivos del futuro".
Al cuestionarle sobre una posible contradicción entre las metas internacionales para combatir el Cambio Climático, con una fuerte promoción de inversión del gas Shale en México, recurso que requiere grandes cantidades de agua para su extracción, Stiner opinó que "sería fácil decir que hay una contradicción pero cuando ves la política energética, lo primero que salta a mi vista -en términos de los compromisos de México- es el compromiso de trabajar en objetivos claros en términos de energía: 30% de energía limpia para 2024, 50% menos de emisiones de Gases Efecto Invernadero para 2050".
Con estas metas, explicó, se establece una dirección para la economía y políticas nacionales y abre la necesidad de generar innovación tecnológica y revisar las medidas fiscales, energéticas y de subsidios.
"Cómo México alcance esos objetivos o qué combinación en términos de generación de energía elija, es algo que no estamos en la posición de comentar", aclaró Steiner.
"Si como medida a corto plazo la explotación del Shell Gas es parte de la combinación para movernos hacia un lado de otras fuentes de combustibles fósiles más contaminadas, puede ser una opción. Pero déjenme ser muy claro, si la inversión en gas Shale se convierte en una razón para no invertir en una transición a la energía limpia, el gas puede convertirse en un pasivo", puntualizó el director ejecutivo del Pnuma.
* Lea además en ElEconomista.com.mx Alistan decreto para desarrollar gas natural