En un comunicado, la Confederación Nacional de Agricultura (CNA) calificó la trama de "lamentable" y "delictiva", y defendió la labor de los agricultores brasileños.
La patronal de agricultores brasileños exigió el "mayor rigor" para esclarecer la red, desmantelada por la policía de Brasil, que se dedicaba a adulterar la carne del país y que incluso la vendía caducada.
En un comunicado, la Confederación Nacional de Agricultura (CNA) calificó la trama de "lamentable" y "delictiva", y defendió la labor de los agricultores brasileños.
"Los productores rurales han dado una gran contribución al desarrollo nacional, generan empleo, renta y alimentos de calidad para la población, por lo que no es justo que tengan su imagen manchada por la acción irresponsable y criminal de algunos", asegura el documento.
La patronal de los agricultores pidió que "los hechos que implican a empresas y fiscales agropecuarios sean investigados con el mayor rigor y que, una vez comprobados, puedan llevar a un castigo ejemplar para todos los responsables".
La Policía Federal de Brasil realizó una operación para desarticular la banda, formada por empresarios, funcionarios públicos y políticos, que adulteraban carnes, incluso caducadas, y posteriormente las vendían dentro y fuera de Brasil.
Según la policía, parte del dinero recaudado servía para financiar partidos políticos, entre ellos el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el actual presidente de Brasil, Michel Temer, y el Partido Progresista (PP) que también apoya al gobierno.