Indígenas coras, huicholes, tepehuanos y mexicaneros nunca fueron consultados, ni se obtuvo su consentimiento previo, libre e informado sobre la obra de casi 8.000 millones de pesos (unos US$594,6 millones).

Excelsior.com.mx. La Manifestación de Impacto Ambiental aprobada por la secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para la construcción del Proyecto Hidroeléctrico Las Cruces en la sierra de Nayarit es ilegal porque viola leyes nacionales e internacionales, advirtió la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA).

Destacó que ante esta situación que vulnera normas ambientales y de derechos humanos, informará a instancias como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, dependiente de la Organización de Estados Americanos (OEA), y a los relatores Especiales de la ONU, ya que indígenas coras, huicholes, tepehuanos y mexicaneros nunca fueron consultados, ni se obtuvo su consentimiento previo, libre e informado sobre la obra de casi 8.000 millones de pesos (unos US$594,6 millones) en los términos que establece el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Originarios.

Apenas el 18 de septiembre pasado, la Semarnat emitió una sorpresiva resolución a favor de la construcción de la presa con una cortina de 188 metros de altura sobre el río San Pedro Mezquital, a pesar de las opiniones en contra de científicos, instituciones académicas e instancias del propio gobierno federal, como la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio).

En su oportunidad, el Instituto de Ecología de la UNAM afirmó que la Manifestación de Impacto Ambiental presentada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) carecía de rigor técnico y científico, ya que contenía graves deficiencias conceptuales, meteorológicas y de integración.

Además de que no existía una evaluación cabal de los posibles impactos sobre Marismas Nacionales, hogar de 20% de los manglares de México, ecosistema clave para la mitigación del cambio climático, la migración de aves del Pacífico y la generación de recursos pesqueros.

La Conapesca emitió una opinión técnica contra el Proyecto Hidroeléctrico Las Cruces, por considerar que su construcción “tendría efectos negativos sobre la pesca, los ecosistemas costeros y los recursos biológicos acuáticos en el estado de Nayarit”.

El órgano desconcentrado de la secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) advirtió que uno de los mayores impactos que se generarían al reducir y modificar la aportación de agua dulce y nutrientes del cauce del río San Pedro Mezquital a la zona de humedales de Marismas Nacionales, a la Laguna Grande de Mexcaltitán, al Estero Grande y a Boca de Camichín sería la caída drástica de la producción pesquera en el estado de Nayarit y, probablemente, al sur de Sinaloa.

Al ser consultada por la Semarnat, la Conabio lamentó que en México se insista en obras como la hidroeléctrica Las Cruces, con una capacidad neta de 240 megawatts al año, “que está muy por debajo de otras presas del mismo tamaño”.

Según el proyecto, 14 sitios ceremoniales de coras y huicholes quedarían bajo el agua, así como las comunidades de San Blasito y Saycotal.

Petición

Académicos y organizaciones se pronunciaron en contra del proyecto en Nayarit.

Más de 50 académicos y casi 80 organizaciones pidieron al presidente Enrique Peña Nieto y al titular de Semarnat, Juan José Guerra Abud, revocar la autorización otorgada para la construcción de la Hidroeléctrica Las Cruces.

El pronunciamiento en contra del proyecto fue recibido por la Dirección General de Atención Ciudadana de la Presidencia de la República, en Palacio Nacional.